febrero 28, 2025

Booktoks: la brevedad de estos vídeos y el acceso a través del móvil son los motivos de su gran audiencia

José Rovira Collado, Francisco Antonio Martínez Carratalá y Sebastián Miras
«La hora del booktok: caracterización de nuevos vídeos para la promoción lectora en el móvil»

Pixel-Bit, vol. 72 (2025).

Pixel-Bit. Revista de Medios y Educación (@RevistaPixelBit) | Universidad de Sevilla | Facultad de Ciencias de la Educación | Grupo de Investigación Didáctica | Sevilla | ESPAÑA

Se incluye a continuación el artículo según su edición en HTML.

Véanse las referencias en la publicación original.

Revista de acceso abierto.


Imagen referencial. Tomada de Aragón Noticias.


RESUMEN

Los booktoks son vídeos breves sobre lectura en TikTok, herederos de los blogs literarios y los booktubers. La gran mayoría se crean con el móvil, que es también su espacio natural de reproducción. Esta investigación realiza un análisis cualitativo del contenido en contextos digitales sobre los booktoks en español. A partir de una muestra previa de 500 vídeos, seleccionados a través de las sugerencias del algoritmo de la plataforma, se realiza un análisis de n = 299 vídeos para identificar sus principales características y las diferencias con los anteriores espacios. Se analiza la extensión, la audiencia, la cantidad de comentarios, las etiquetas usadas y la tipología de los perfiles. Posteriormente, se proponen distintos análisis concretos como las etiquetas más usadas; los perfiles más seguidos de nuestra selección (n = 30), señalando cuáles son sus características y su interacción con otras plataformas digitales; y el análisis pormenorizado de varios vídeos para ejemplificar las características. Por último, se seleccionan n = 10 booktoks concretos para presentar las diferencias con anteriores modelos de promoción de la lectura en Internet. Se identifican nuevas dinámicas y se confirma que el móvil supone una menor duración en los vídeos sobre libros que nos aleja de la reflexión literaria.

Palabras clave: booktok, TikTok, promoción lectora, redes sociales, dispositivos móviles, lectura digital, competencia digital, creación de contenido.




INTRODUCCIÓN

El concepto de ‘lectura social’ en entornos digitales zengloba a todos aquellos espacios de promoción o mediación de la lectura en Internet, siendo muchos de ellos epitextos virtuales de lectura, entendidos como documentos y recursos digitales que tanto empresas editoriales, centros educativos o personas individuales «crean para la venta de libros y la promoción de la lectura por Internet, de múltiples tipos, con funciones comunicativas como comentar, difundir, modificar y ampliar» la información sobre un texto literario. ya que aportan mucha información sobre la lectura, la literatura y los libros en general. Desde 2020, dos espacios encuentran la máxima atención entre las generaciones más jóvenes: los bookstagramers y los booktoks. Los primeros son propios de Instagram, «existe un grupo de bibliófilos que la está empleando para ensalzar el libro como objeto estético, como elemento de culto en sí mismo».

Así «convierten su Instagram en un catálogo de fotos artísticas protagonizadas por aquellos libros que, en cierta manera, ellos idolatran y recomiendan al resto de lectores». Los segundos, que son el objeto centra de nuestra investigación, son breves vídeos sobre lectura y literatura en TikTok, una red social de vídeos para ser creados, difundidos y disfrutados principalmente a través de dispositivos móviles. Estos nuevos vídeos de promoción lectora son una evolución de modelos anteriores, como los basados en el texto escrito, como los blogs o los foros literarios; los basados en vídeos, como los booktubers de los que son herederos directos o los espacios que permiten compartir tanto fotografías como vídeos (reels o stories) para hablar de lecturas, como los citados bookstagramers.

En los principales informes de usos de redes sociales se comprueba que ambas redes tienen el mayor crecimiento y proyección en la actualidad. Pero son los booktoks los que han adquirido mayor atención en este momento y donde se incorporan las y los más jóvenes lectores. En 2020, la editorial Penguin ya recomendaba los principales perfiles de booktokers y se encuentran distintos informes y estudios que señalan el aumento del uso de estos vídeos en el mundo editorial como elementos publicitarios y de promoción lectora que influyen en la elección de las próximas lecturas de sus espectadores.

Los booktubers como antecedente directo para la animación lectora con vídeos en Internet ya ha sido debidamente analizado en los últimos años. Esta es una comunidad que se dedica «a la recomendación de libros y al fomento de la lectura focalizando sus mensajes a través del formato videoblog». Los booktubers nos permiten «profundizar en nuevas prácticas juveniles fuera del aula que remiten a la promoción de libros y a la expresión crítica y juiciosa sobre aspectos relacionados con el contenido, los formatos, los géneros y los autores». Desde hace años, en Internet la crítica literaria de las jóvenes personas que leen ya no se realiza en reseñas escritas, sino en videorreseñas, donde el booktok es el espacio de mayor proyección.

Una de las diferencias principales de estos vídeos con los booktubers es el móvil como espacio natural para su desarrollo, que produce audiencias masivas y la aparición de nuevas figuras, como las y los influencers, nuevas celebridades impulsadas por su participación en redes sociales. También la simplicidad para compartir y consumir estos productos en el móvil ha generado un nuevo concepto, el de «creadores de contenido», que son aquellas personas que publican en estas redes vídeos de cualquier temática, de forma periódica para generar una gran audiencia. El número de visionados de estos vídeos y la visibilidad de estas personas permite que sus perfiles reciban una retribución económica según el número de reacciones, comentarios y visitas, llegando a recibir pequeñas fortunas.

Existen ya distintas investigaciones centradas en este nuevo fenómeno de mediación literaria a través de Internet, la mayoría en el ámbito anglosajón, confirmando que es un espacio de interés para la lectura social y la comunicación literaria en la red. En una reciente revisión sistemática sobre los métodos y resultados de investigación sobre lectura, tanto en Instagram como en TikTok, se señalan las diferencias y novedades en su uso, y también los elementos comunes con anteriores dinámicas citadas. Sin embargo, no existe todavía una descripción pormenorizada de su importancia en el ámbito de la lengua española.

Por lo tanto, el objetivo principal de esta investigación es proponer una caracterización de los booktoks en español. Como objetivos secundarios se describen, en primer lugar, algunos usos concretos de este tipo de vídeos, y, en segundo lugar, se señalan las principales diferencias con modelos anteriores.



METODOLOGÍA

Esta investigación propone una selección de booktoks en español y un análisis de contenido pormenorizado para identificar nuevos usos y diferencias con otro tipo de epitextos virtuales de lectura. Se aplican los modelos netnográficos de Kozinets para llegar al corpus seleccionado. En primera instancia, se parte de una primera selección de más de 500 booktoks, agrupados en una lista concreta (https://www.tiktok.com/@joseroviracollado/collection/Booktok-7193946691401796357) para conocer las etiquetas más usadas y las características generales de estos vídeos. Se parte de una navegación recurrente a través de un perfil concreto con unas búsquedas sistemáticas para identificar vídeos relacionados con la investigación.

El perfil utilizado se creó en febrero de 2020, un mes antes del confinamiento global provocado por la Covid-19, cuando además esta plataforma recibió un gran crecimiento tanto en personas inscritas como en vídeos publicados. El contacto inicial y las primeras sugerencias de vídeos estuvieron mediadas por el algoritmo de la herramienta. Es necesario recordar que su algoritmo está destinado a generar adicción entre las y los espectadores más jóvenes. Aunque la propia herramienta incluye anuncios para evitar el uso continuado, los riesgos del scroll infinito son importantes, sobre todo entre las personas más jóvenes que pueden pasar horas y horas visionando breves vídeos.

La herramienta ofrece dos opciones para ver vídeos: «Siguiendo» (Following), donde se incluyen los perfiles que se siguen; y «Para ti» (for you) con vídeos nuevos según los gustos e intereses que la propia herramienta considera que una persona tiene. Estas dos vías de acceso a nuevos contenidos han sido también incorporadas por X, la antigua Twitter, o la reciente Blue Sky, para organizar el timeline de cada usuario de dos maneras, una por las personas a las que sigue, y otra por lo que el algoritmo considera que le puede interesar.

Durante el uso inicial de la herramienta entre 2020 y 2022 se insistió para forzar que el algoritmo ofreciese generalmente contenidos relacionados con la lectura y los libros. Se realizaron búsquedas periódicas con estos términos principalmente: ‘book’, ‘booktok’, ‘lectura’, ‘libros’ y ‘literatura’. En distintas búsquedas se comprobó que la herramienta no siempre ofrece los vídeos con más reproducciones, también otros que son tendencia o más recientes. Desde el primer momento se siguen los perfiles que generan este tipo de vídeos y se señalan los vídeos con un «me gusta» (like, un símbolo de corazón que se marca en rojo).

Aunque en la navegación rutinaria siguen apareciendo otros contenidos alejados de la promoción lectora, se consiguió que más del 50 % de los vídeos estén relacionados con estos temas. En junio de 2024, el perfil utilizado sigue a más de 7500 cuentas, de las cuáles más de 6000 están relacionadas con esta línea de investigación. En el transcurso de la recopilación de datos, TikTok añadió junto al corazón rojo otro icono para marcar «favoritos» (favorites, una etiqueta amarilla). Esta opción es similar a la opción en Instagram para poder organizar colecciones de temas concretos.

Al ser mayoritariamente una navegación móvil, los resultados ofrecidos están en función de lo que considere el algoritmo asignado a cada cuenta. Por lo tanto, el algoritmo de TikTok puede cambiar los resultados obtenidos en cualquier búsqueda. Frente a otras plataformas como Youtube, donde una búsqueda con términos concretos puede dar resultados similares, en TikTok el propio uso del móvil del usuario puede dar resultados diferentes en cada dispositivo. Se tienen en cuenta los posibles sesgos informacionales para este tipo de investigaciones en plataformas digitales, sesgos propiciados por la ausencia de neutralidad de mismas. El historial de navegación del perfil utilizado, así como la interconexión con otros programas, cookies y redes sociales pueden influir en la presentación de resultados.

Una vez recogido el corpus inicial de 500 vídeos se revisan otras investigaciones sobre TikTok para confrontar distintos procedimientos para la clasificación de los vídeos. En este sentido, el equipo investigador aplica el siguiente proceso para realizar la selección de booktoks, recogido en la Figura 1.


Figura 1. Diagrama de Flujo selección Booktoks

Elaborada por los autores.


Siguiendo la netnografía de Kozinets se definen unos criterios de selección y análisis. Además, se concreta un análisis cualitativo temático. Se concreta la pregunta de investigación a partir de los objetivos seleccionados. Los 500 vídeos iniciales se han analizado individualmente por los integrantes del equipo investigador, para posteriormente poner en común las características generales. Este análisis se realizó entre noviembre de 2023 y marzo de 2024. En esta parte de la investigación se ha optado por no incluir el análisis de las interacciones y comentarios de las y los espectadores, datos que pueden incluirse en posteriores publicaciones.

Además, tanto las categorías establecidas como los resultados obtenidos se han contrastado con usuarios y usuarias de la plataforma interesadas en la promoción lectora en Internet. En este equipo externo han participado tres investigadores senior y tres investigadoras jóvenes interesadas en los distintos usos del booktok.

Se recogen datos concretos de cada vídeo seleccionado y de los perfiles donde se publican, como son duración, audio, número de etiquetas y todas ellas, audiencia, con número de seguidores y número de personas seguidas por el perfil; en los vídeos también número de visionados, número de «Me gusta», número de «Compartidos», número de comentarios y se establecen distintas tipologías para clasificar el contenido como: Libro físico, Libro digital, Personas: Chica, Personas: Chico, Espacios, Digitales-Otros, como vemos en la descripción pormenorizada de las tablas del anexo Zenodo. En el audio se diferencia si es una grabación propia o se una música pregrabada que ofrece la plataforma. En los perfiles también se señala si se indica el uso de otras plataformas como: Instagram (IG), Wattpad (Wtt), Portal, Goodreads (G), YouTube (YT), Twitter (Tw) y Facebook (FB).

A partir de los 500 vídeos se concretan distintos requisitos para la primera selección: 1. Que sean perfiles activos; 2. Que sean sugerencia del Algoritmo en la sección «Para ti»; 3. Que el contenido pueda etiquetarse con #booktok; 4. Que el perfil tenga un mínimo de participación (15 vídeos). Además, se confirma que todos los vídeos estén disponibles en abierto si necesidad de entrar en la plataforma para respetar la privacidad de cada cuenta. También se concretan las variables descriptivas y los motivos de exclusión: los vídeos tenían que estar en español o creados por perfiles hispanohablantes y centrados en el ámbito de la lectura. Respecto a la lengua de uso, se permitió en algún caso el inglés para señalar nuevas tendencias, como se verá más adelante.

También se excluyeron muchos vídeos por ser perfiles o dinámicas repetidas, dejando un corpus final de 299 vídeos (-201 vídeos descartados). Posteriormente se realiza otra selección individual para señalar tanto los vídeos (30) como los perfiles (30) más significativos estableciendo las siguientes variables centrándonos en datos concretos: V1 Audiencia, Seguidores/as y Visionados; V2 Uso de etiquetas; V3 Características del vídeo; y V4 Clasificación de dinámicas, ofreciendo una lista final de 10 vídeos.

Por último, se definen distintas categorías para la descripción de los vídeos, así como los principales datos descriptivos de cada vídeo y perfil para concretar el análisis, que parte de noviembre de 2023.



ANÁLISIS Y RESULTADOS


Resultados descriptivos globales sobre los 299 vídeos

Parte de los resultados descriptivos se recogen como anexo externo en Zenodo (https://zenodo.org/records/14507130). En la Tabla Zenodo I, de los 299 vídeos analizados finalmente, hay una media de 39.59 segundos de duración, con un rango que va desde un mínimo de 4 segundos y un máximo atípico de 553 segundos. Se han identificado 10 vídeos como presentaciones de diapositivas, que seguramente provienen de otras plataformas, y el resto, 289 son dinámicos. El porcentaje de vídeos inferiores a 39 segundos representa un 67.82 % del conjunto de vídeos dinámicos (299) analizados e indica la brevedad como característica esencial de los contenidos en la plataforma. En cuanto al contenido referido al audio se han distinguido 175 vídeos que emplean música (58.53 %) y 124 (41.47 %) en los que la persona protagonista del vídeo es la que se dirige al espectador con su propia voz.

Hay un total 53 027 954 visionados (M = 17 7351.02); 3 823 354 «Me gusta» (M = 12 827.49); 130 484 compartidos (M = 439.34); y 21,445 comentarios (M = 72.21).

Respecto a la Tipología o elemento central aparece principalmente el Libro (166; 55.52 %), Chica/Libro (61; 20.40 %) o solamente Chica como protagonista (23; 7.69 %), frente a otras opciones menos empleadas como el empleo de Kindle u otros dispositivos digitales de lectura (3; 1 %). La presencia del libro físico como protagonista es la tendencia más destacada en 245 booktoks (81.94 %) de las diferentes tipologías. Entre los 299 vídeos hay 278 perfiles distintos ya que varios se repiten. Se identifica el sexo de 242 vídeos (221 mujeres y 21 hombres); 5 editoriales, 5 instituciones, 5 librerías, 3 comunidades de lectura como «Qué leer» y 4 en «otros». También se ha señalado la participación en otras plataformas como estrategia transmedia.


Etiquetas más usadas

En la Tabla 1, se muestran las 25 etiquetas más empleadas en el conjunto de 299 vídeos analizados. Las tags son una herramienta fundamental para la localización de estos vídeos, como también lo son en otros espacios afines como los blogs literarios (García & Rubio 2013). En total se han recogido 1137 etiquetas, que en conjunto se han usado 2945 veces (cantidad empleada para el cálculo de la Frecuencia Absoluta). Estas veinticinco palabras clave acumulan el 40.81 % del total de las etiquetas recogidas (las 1112 etiquetas restantes representan el 50.19 % del conjunto). Se incorpora una columna con el número total de visionados de la etiqueta según los datos de la propia plataforma el 20 de enero de 2024. Se incluye el dato con la abreviatura B (billions-miles de millones en inglés) para confirmar la audiencia de la plataforma, llegando algunas a miles de millones de visionados. Además, este dato seguramente ha crecido en este breve periodo de tiempo por el continuo tráfico de la aplicación.


Tabla 1. 25 etiquetas más empleadas en los 299 vídeos analizados

Elaborada por los autores.


Las etiquetas están organizadas por el número de apariciones en los 299 vídeos, siendo «booktok» la más usual, ya que define la categoría, con 277 apariciones (el 92.64 % del conjunto) con una Frecuencia Absoluta de 7.71 sobre el total de 2945 etiquetas. «Libros», «booktokenespañol», «LibrosLibrosLibros», «librosrecomendados», «booktokespaña» o «librosTikTok» son otras de las etiquetas que aparecen recurrentemente en esta selección de 299 vídeos en español. Aparecen otras etiquetas como «fyp» que responde a for you page, «página para ti», o for you, «para ti», con miles de millones de visualizaciones, siendo estrategias para viralizar los vídeos. Posteriormente, sobre las 200 etiquetas más vistas de las 1137 usadas, se ha creado esta figura con WordArt para visualizar cuáles son las más importantes.


Figura 2. 200 etiquetas más usadas en los vídeos analizados

Elaborada por los autores.


Análisis de 30 perfiles lectores en TikTok

En esta segunda selección se realiza una descripción de los 30 perfiles con más seguidores de la lista de 299 vídeos. Se analizan los números globales, como el total de vídeos publicados, las personas seguidoras y las visualizaciones, especificando algunas características del perfil o su interacción con otras redes sociales, como se ve en la Tabla 2. La descripción detallada de los perfiles y sus nombres están en la Tabla II del Anexo-Zenodo.


Tabla 2. Características descriptivas de los 30 perfiles con más seguidores

Elaborada por los autores.


La elección de perfiles más destacados se ha realizado a partir de los treinta usuarios y usuarias (sin considerar portales, editoriales o bibliotecas, por ejemplo) con un mayor número de personas seguidoras. En este aspecto, se observa en la Tabla II Anexo como destaca una usuaria (@fantasyliterature) con un mayor número de seguidores (1 187 392), dividiéndose la muestra al 50 % entre aquellos que tienen más de 30 000 seguidores y los que oscilan entre 29 999 y 8900 (siendo más representativo el intervalo entre 29 999 y 10 000). También se muestra una representatividad más acentuada de las mujeres frente a los hombres, con casi el 90 % de presencia femenina, además de que entre los quince perfiles con más de 30 000 seguidores tan solo hay dos hombres como son los usuarios @sans.reyes (129 076 seguidores) y @javierruescas (87 328 seguidores). Entre este conjunto de usuarias y creadoras de contenido en TikTok suman un total de 9800 vídeos, siendo los perfiles más activos @sans.reyes (975 vídeos) y @roibooks (969 vídeos).

Diez de estos perfiles analizados superan los 400 vídeos subidos a su canal. Del mismo modo, se observa que estas usuarias y usuarios cuentan con una gran comunidad de personas que les siguen que prefieren la retroalimentación a partir de las opciones de «Me gusta», siendo la usuaria más destacada @patriciafedz que cuenta en su cuenta más de 7 millones de interacciones positivas sobre sus contenidos, siendo una verdadera influencer de la literatura.

Otro aspecto que se ha tenido en cuenta en el análisis era la comprobación de si TikTok era su plataforma principal de interacción o si empleaban otras redes sociales para completar su identidad digital. En este caso, entre los perfiles más destacados hay ocho usuarios que en su biografía remiten a otra plataforma, siendo la más habitual Instagram (53.33 % de los casos). Comparando los perfiles en ambas plataformas, la particularidad es que la mayoría de estos (13 usuarios) cuentan con más seguidores en TikTok que en Instagram. De todas formas, se observa cómo la mayoría de las personas de una plataforma disemina su contenido en otras plataformas y lo especializa dependiendo del contenido y así se encuentra la presencia de otros portales relacionados con la promoción literaria como, por ejemplo, Goodreads.



Análisis de 30 vídeos destacados

Aunque en la plataforma se generan perfiles célebres con miles de seguidores, los ya citados influencers, nuestro análisis se centra más en la tipología de vídeos que ofrecen y las novedades que presentan. Por eso, se ha realizado otra selección de 30 vídeos, cuyos datos principales están en la siguiente Tabla 3.


Tabla 3. Características generales de los treinta vídeos seleccionados

Elaborada por los autores.


Al igual que en el caso anterior, se ha incluido en la Tabla III del Anexo-Zenodo los datos concretos de los 30 vídeos, con la dirección completa para acceder a ellos, las etiquetas usadas, los visionados, los «me gusta», la duración de cada vídeo y el número de comentarios.

El booktok más largo dura más de dos minutos y el más breve (el 34), solo cinco segundos. Este sigue la dinámica «What are you reading?» de la que se hablará más adelante. En la selección aparecen vídeos con pocos visionados (598), me gusta (49) y comentarios (1), pero los se ha incluido para identificar nuevas dinámicas. Pero si se atiende a los totales, es necesario señalar que estos 30 vídeos tienen más de dieciséis millones de visualizaciones, dos millones de me gusta y más de once mil comentarios, por lo que tienen una audiencia muy importante, con números superiores a los anteriores booktubers. La brevedad de estos vídeos y el acceso a través del móvil son los motivos de esta gran audiencia.

La distribución de los protagonistas de los 30 booktoks es la siguiente: 13 Libro; 8 Chica/Libro; 5 Chica; 2 Chico/Libro; 2 Chico; 1 Chica/Autor. Se han utilizado los términos «chica» y «chico» para señalar la juventud e informalidad de los vídeos. Se puede destacar que en 25 vídeos, el libro es el protagonista, acompañado por hombres y mujeres. Hay más vídeos donde aparecen mujeres como protagonistas (14) frente a hombres (4), aunque este dato es inusual, porque en general los hombres no suelen llegar al 10 % de estos vídeos. Se debe a que se señala algún vídeo con algún protagonista masculino con mucha audiencia.

Para finalizar, se realiza una última selección, basada tanto en la novedad de las dinámicas como en la propuesta multimodal que ofrece cada vídeo, analizada en otra investigación (Rovira Collado et al., 2024). Se proponen diez dinámicas distintas identificadas en estos 10 vídeos. No se siguen clasificaciones precedentes (Tomasena, 2021) para proponer un análisis concreto, por lo que propone una clasificación multimodal novedosa.


Tabla 4. Selección de 10 vídeos y descripción de las diferentes dinámicas

Elaborada por los autores.


Se constata que muchos de estos vídeos tienen gran audiencia, con miles de likes. Solamente el primero ¿Qué estás leyendo? (What are you reading?) tiene muchos menos, pero se incluye porque fue de los primeros en incorporarse a la lista y es el que más claramente demuestra una nueva dinámica. Junto a este, Fiesta de seguidores-lectores (Readers Follow Party) son las dos dinámicas más novedosas frente a modelos anteriores.

Ambos booktoks son muy breves e indican nuevas dinámicas hiperbreves y también en ambos casos el protagonista son los libros o las estanterías siendo grabaciones muy cortas acompañadas de una pieza de audio concreta que pone título a estas dinámicas en inglés.

En el primer caso, inicialmente se muestra solo la parte inversa al lomo del libro, las páginas sin poder identificar el libro, para al final de la grabación, mostrar la cubierta con el título del libro. El vídeo dura solamente cinco segundos de acuerdo a la grabación de audio que está disponible en la plataforma https://www.tiktok.com/music/Whats-this-person-reading-right-now-6904077601871170309. Al consultar este sonido disponible se comprueba que cuenta con más de cien mil booktoks similares, que se basan en esta misma dinámica y grabación, siendo una nueva tendencia destacada.

El segundo ejemplo, Fiesta de seguidores-lectores también se basa en el uso de una grabación de audio concreta. En este caso, es la traducción de Readers Follow Party, https://www.tiktok.com/tag/readerfollowparty que se ha usado en más de diez mil ocasiones, aunque generalmente en inglés.

El tercer vídeo, Bibliotecas, muestra un uso de mediación profesional, donde la encargada de una biblioteca pública (@bibliotecaugena) propone vídeos sobre su día a día, también con vídeos muy breves, en este caso 13 segundos para presentar varios libros.

El cuarto ejemplo, Tipos de Booktoker, presenta a una joven protagonista hablando de libros, mostrando los tipos de nuevos lectores que se identifican con estas dinámicas. Aunque no todas las protagonistas son adolescentes, estos vídeos también muestran un cambio generacional con anteriores modelos.

En el quinto caso, Promoción lectora, muestra a Iria y Selene, famosas booktubers y autoras de literatura juvenil que prueban nuevas dinámicas en TikTok. Aquí presentan su nuevo libro con una conocida canción de fondo, Naughty (Alisha Weir & The Cast of Roald Dahl’s Matilda The Musical). Como en otros casos, el uso del sonido genera una tendencia. El uso de esta canción del musical Matilda es muy habitual para presentar bromas o actos traviesos, siendo el humor un aspecto común a muchos de estos vídeos.

Así es el sexto tipo, Editoras, identificado así porque la protagonista se identifica como tal, aunque lo que ofrece es una broma sobre la enorme lista de libros deseados (Wish List) que tiene. Sin embargo, en este caso, apenas aparecen libros, pero sí se señala la pasión por la lectura. Otra vez el vídeo basa su efecto en un audio «ding dong», donde después de un ruido sordo como un golpe a una puerta, una voz fémina imita el sonido de una campanilla para aparecer de repente.

Algunas de las dinámicas seleccionadas tienen una mayor relación con Youtube y modelos anteriores. Ya se ha hablado de la importancia de la «creación de contenidos» y la aparición de nuevos influencers. Es el caso séptimo, Bookinfluencer, donde Patricia Fernández ha conseguido una legión de seguidores hablando de libros. En este caso, también se destaca la importancia de la imagen que ofrece la protagonista, una mujer joven y atractiva, como en otras redes sociales. Este booktok ha recibido ya más de doscientas mil visualizaciones, veinte mil likes y muchos comentarios. @patriciafedz tiene una producción constante de vídeos y cientos de miles de seguidores por lo que ya se puede señalar en la categoría señalada.

También es influencer de lectura Javier Ruescas, porque además de autor de literatura juvenil participó tanto de los blogs como de los booktubers. En Día del libro propone un vídeo con contenidos sobre el origen de esta efeméride. Ruescas demuestra su adaptación al nuevo medio, también con una gran audiencia.

No es una categoría novedosa la de los Videopoemas donde se aprovecha la voz registrada de algún poeta o directamente se graba a otra persona recitando sus versos. En este caso @marinalcuadrado ofrece una grabación centrada en ella, con más de ciento cincuenta mil visualizaciones. Este tipo de videopoema es más cercano y su protagonista hace atractiva la poesía, frente a dinámicas tradicionales de videopoemas en Youtube basadas generalmente en montajes con fotografías.

Así es el último caso, Así dijo..., una dinámica intermedia, porque se centra en recoger citas célebres, generalmente con montajes sobre fotos fijas, pero también muy breves. En el ejemplo seleccionado se ve como se recuerdan las palabras del poeta uruguayo Mario Benedetti.



DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES

A partir de la pregunta de investigación y objetivo principal, se considera que los distintos análisis propuestos permiten una caracterización concreta de los booktoks en español como nuevos epitextos virtuales para la promoción de la lectura. Desde el análisis global de 299 ejemplos a las distintas selecciones, se muestra un amplio recorrido que permite concretar la evolución desde espacios anteriores. El primer hallazgo son las dos primeras categorías de booktok. Ambas son dos de las dinámicas más novedosas de #Booktok y el protagonista central de ambas prácticas son los libros. Aunque los ejemplos seleccionados son de usuarias hispanohablantes, las etiquetas y audios originales son en inglés, con mucha mayor proyección, siendo claras tendencias en el ámbito de TikTok.

Se puede proponer un rápido recorrido desde los foros literarios como primeros epitextos digitales desde 2003, los blogs literarios desde 2006, con muchísimas variedades, hasta los booktubers, que tuvieron su momento entre 2011 y 2018 aproximadamente. También entre 2014 y 2020 las redes sociales de lectura como Goodreads sustituyeron a espacios precedentes. Ya en 2016 se puede empezar a hablar de Bookstragram, y desde 2020 es el auge de los Booktoks.

La creación de vídeos y el análisis de otras producciones puede ayudar al desarrollo de las competencias digitales y los vídeos anteriores ya demostraron su utilidad pedagógica. Ya existen propuestas específicas para llevar estas dinámicas de TikTok al aula.

Se debe asumir que esta es una categoría diferente a los anteriores modelos. Algunas de las características que se pueden inferir de la descripción realizada son:

• Se trata de vídeos generalmente mucho más breves que los anteriores, que se consumen mucho más rápido y donde muchas veces no se puede profundizar en el análisis literario. Pero esta brevedad también supone una mayor audiencia, superando las cifras de anteriores modalidades.

• El espacio de creación y difusión de estos vídeos es el móvil. Aunque algunos se pueden grabar y editar con otros recursos, como se hacía con los booktubers, la gran mayoría se crea a través del móvil. Han aparecido múltiples aplicaciones de edición para los distintos sistemas operativos móviles que ayudan a la edición de estos vídeos.

• La experiencia plena para disfrutar de estos vídeos se debe hacer con un perfil activo que reciba sugerencias del algoritmo de la herramienta. En los booktubers se podían navegar por muchos vídeos sin necesidad de estar dentro del perfil de Google. En cambio, si se quiere ver múltiples booktoks hay que tener un perfil activo en la plataforma. Esto además permitirá crear grupos, seguir etiquetas y realizar comentarios más directamente.

• Aunque también existen bookinfluencers, en muchos casos el protagonista absoluto del vídeo es el propio libro, lo que puede llevar a distintas aplicaciones didácticas.


Se asumen las limitaciones de esta investigación, con un corpus concreto de vídeos y con unas características asignadas principalmente por el algoritmo de la plataforma. También se asume el sesgo del propio equipo investigador que busca identificar las diferencias con epitextos anteriores. Quedan pendientes análisis más exhaustivos como los realizados con los booktubers, aprovechando API concretas para obtener macrodatos de estas interacciones.

Como prospectiva se plantea identificar cuáles son las tendencias literarias que promueven los booktoks, aunque se augura que serán los superventas de la literatura juvenil de cada momento. Queda por confirmar cuánto influyen estos vídeos en las ventas de cada género. También se pueden plantear análisis concretos de las interacciones entre creadores de contenido y las personas que les siguen. Comentarios, emisiones en directo, replys (respuestas a otros vídeos), duets (grabar vídeos entre dos personas desde dos dispositivos) o stitch (pegar vídeos) y otros tipos de interacciones son espacios por analizar. Entre los epitextos virtuales, es la hora del #Booktok.




febrero 21, 2025

La tarea de descifrar los textos mediáticos pertenece al destinatario, independientemente de la voluntad del autor


Olga Shevchenko y Elena Remchukova, de la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos (Peoples' Friendship University of Russia, RUDN) (@UniversityRudn)
«Componentes linguocreativos en los medios de comunicación masiva actuales en España en el aspecto de las relaciones “remitente – destinatario”»

Tonos Digital, n.º 32 (enero de 2017)

Tonos Digital. Revista Electrónica de Estudios Filológicos | Universidad de Murcia | Murcia | ESPAÑA

Extracto de apartados en páginas 1 y 12 de la publicación en PDFVer las referencias en la publicación original.

Licencia Creative Commons.


Imagen referencial de iStock, tomada de El HuffPost (@ElHuffPost).


RESUMEN

En este artículo se trata del uso de los medios linguocreativos como recurso del aumento del nivel de dialogismo de los textos periodísticos analíticos. Interactuando con los medios metafóricos de los textos periodísticos los medios linguocreativos (neologismos, citaciones transformadas, unidades fraseológicas, titulares polisemánticos) forman la parte pragmática del artículo analítico actual. Además los medios linguocreativos ayudan a expresar la opinión del autor.

Palabras clave: remitente, destinatarios, medios linguocreativos, contaminación estilística, influencia.



CONCLUSIÓN

Es importante precisar que independientemente de la actitud y opinión del destinatario potencial del texto mediático sobre tal o cual problema, acontecimiento o tema el periodista, según opinamos, siempre trata de dialogar con el lector y en eso radica el éxito pragmático del texto periodístico.

«Todas las reflexiones sobre el lenguaje periodístico, la descripción de sus códigos, sus rasgos diferenciales y sus modalidades estilísticas, de sus notas ideales, objetos de estudio en la redacción periodística, tienen como fin principal el que los textos periodísticos sean leídos y dejen poso en el lector. Así se cumple en el periódico, sea cual sea el canal de su transmisión, la función general del texto» (MOreno Espinosa, véase referencia en la publicación original).


De hecho, el objetivo principal no se reduce a tan solo la manipulación sobre la conciencia del lector (aunque los elementos de manipulación son parte pragmática de casi cualquier texto mediático), sino que de forma expresiva trata de influir en su actitud, invitarle al análisis conjunto, y, tal vez, la «no aceptación» de la modalidad categórica del autor puede despertar la «discusión interior», y en este caso la meta ha sido alcanzada.

Resumiendo, se podría decir que el autor del texto periodístico actual en España acude a una gran variedad de medios metafóricos y linguocreativos, que permiten la interacción entre el autor y el lector e invitan al diálogo con el destinatario potencial.

Muchas veces el periodista expresa su opinión de una forma bastante perentoria y también acude a las comparaciones metafóricas, ironía, sarcasmo, dinamismo estilístico y a otros recursos linguocreativos, pero siempre dejando al lector el derecho a tener su propia opinión y a la interpretación del código lingüístico.

En general, los textos mediáticos son representados como una especie contextos metafóricos que al final se actualizan independientemente de la voluntad del autor, y con el paso del tiempo, pueden adquirir un sinfín de contextos, y la tarea de descifrarlos le pertenece al destinatario.




febrero 14, 2025

Aunque la biblioteca no crea esta programación, se llega a hacer porque el equipo tiene ganas de escuchar y de aprender: slam poetry en la biblioteca Gabriel García Márquez


Félix Manito y Danielle Bishop
«Biblioteca Gabriel García Márquez: la mejor biblioteca pública del mundo. Entrevista a Neus Castellano Tudela»

CCK, n.º 24 (septiembre-diciembre de 2024).

Revista CCK (Ciudades Creativas Kreanta) | Fundación Kreanta | Editorial | Revistas | Barcelona | ESPAÑA

Se incluye a continuación el artículo según su edición en PDF, con algunas modificaciones formales para su publicación en este blog.

Revista de acceso abierto.



La Biblioteca Gabriel García Márquez del Ayuntamiento de Barcelona es un proyecto de SUMA Arquitectura. Las imágenes son de la web de los arquitectos.


La red de bibliotecas municipales de Barcelona se compone de 40 centros, una de referencia en cada uno de los 10 distritos y 30 de proximidad. Son los equipamientos culturales mejor valorados por los barceloneses: en el último barómetro del consistorio, obtuvieron una nota de 7,8 sobre 10. Esta realidad es el resultado del Plan de Bibliotecas de Barcelona del 1998. Desde tu conocimiento y tu larga experiencia en la red, ¿cuáles son las claves que en su momento permitieron su aprobación y su posterior implementación?

He tenido la oportunidad de viajar y explicar a mucha gente el «milagro» de las bibliotecas de Barcelona, como lo llegaron a decir en un congreso en Milán. Siempre he dicho que un éxito no se improvisa, viene de muy lejos. Este Plan de Bibliotecas de Barcelona 1998-2010 [NOTA 1] fue el origen de la creación del Consorcio de Bibliotecas de Barcelona, la empresa pública participada por el Ayuntamiento y la Diputación de Barcelona que gestiona las 40 bibliotecas de la red. Sin embargo, hay mucha historia atrás que lo ha hecho posible.

Si nos remontamos al 1915, un siglo atrás, Cataluña fue la primera región en España que tuvo un Plan de Bibliotecas. Paralelamente a este Plan de Bibliotecas, se creó una Escuela de Bibliotecarias y se desarrolló un despliegue de unas bibliotecas, todas iguales, con una tipología muy parecida a lo que estaba pasando en el mundo anglosajón a las bibliotecas Carnegie. En los momentos previos al Plan de 1998 había muy pocas bibliotecas en Barcelona —estaban las de la Fundación la Caixa y había una biblioteca pública— y las pocas que había eran muy diferentes, cada una con su horario y sus fondos.

Todo esto es el origen de que algunos profesionales ya formados en cultura de bibliotecas, que sobre todo desarrolló la Diputación de Barcelona, en el año 1998 presentaron al Ayuntamiento un plan para ordenar las bibliotecas de la ciudad.

Hay tres factores claves que permitieron su aprobación. Primero, cuando se presenta este Plan de Bibliotecas, tiene la aprobación de todo el consistorio y de todos los grupos municipales; es decir, un consenso político. Segundo, es un plan que mira lejos, a los 10 años. Esto es importante, porque con la situación de las bibliotecas en aquel momento, no se podía limitar solo a abrir unas 3 o 4 bibliotecas y ya está. Y tercero —y quizás lo más importante— es un plan ambicioso y hecho por profesionales, no por políticos. Es aprobado por políticos, pero está hecho por profesionales con una larga experiencia en bibliotecas y por técnicos que sabían de qué hablaban.

Este primer plan sirvió para desplegar un mapa de las bibliotecas en Barcelona, marcando el objetivo que Barcelona tenía que tener en un plazo de unos 20 años unas 40 bibliotecas, como Helsinki. El modelo a seguir en aquel momento era Helsinki, tanto por número de habitantes como por la disposición que se quería. Entonces, se hizo el primer plan y se desplegó el mapa.

Después, el plan se revisó en el 2010 bajo la gerencia de una gran profesional de las bibliotecas, Assumpta Bailac. Este segundo plan, que se llamó Bibliotecas de Barcelona 10 años + y que cubrió el período de 2011 a 2020 [NOTA 2], para mí fue muy estratégico, ya que se centraba en los servicios. Mientras seguíamos desplegando el mapa de equipamientos, actualizamos y modernizamos todos los servicios de las bibliotecas de Barcelona: el préstamo interbibliotecario, los servicios digitales, las salas multimedia, etc.

El tercer plan, el Plan Director de Bibliotecas de Barcelona de 2030 [NOTA 3], que se firmó en 2022 después de la pandemia, es el que mira hacia el horizonte de 2030 y viene a ser una culminación de todo lo anterior, porque este habla de la participación y los derechos culturales de los usuarios. Con la incorporación de la Biblioteca Gabriel García Márquez, ya tenemos 40 equipamientos desplegados, ya ofrecemos los mismos servicios en todas las bibliotecas y, por lo tanto, ahora escuchamos y trabajamos con el ciudadano.

De todo este proceso que empezó en 1998, creo que el éxito ha sido que todos los grupos municipales han tenido claro siempre el valor de las bibliotecas. Si ha habido consenso en algún tema, ha sido en el de las bibliotecas. También es verdad que ha habido consenso porque, paralelamente, los ciudadanos iban yendo a las bibliotecas que abrían en sus barrios, que como equipamientos de proximidad las iban valorando muy bien.

Durante muchos años fuimos los primeros en toda la encuesta Ómnibus. Con esta valoración de 7,8 sobre 10 ahora somos segundos después de los bomberos, que entraron hace un par de encuestas; pero de servicios culturales, seguimos siendo los primeros. Y claro, para los grupos municipales es muy satisfactorio ver que los ciudadanos van valorando bien a las bibliotecas. Además, hace falta destacar que cuando se aprueba el primer Plan de Bibliotecas en 1998, se aprueba también una asignación de recursos económicos que se renueva anualmente, la cual permite que, al ser de acuerdo de todos los grupos, el Plan tenga una continuidad garantizada. Esto, combinado con la gestión por parte del consorcio de Bibliotecas de Barcelona, ha hecho posible lograr los objetivos de los tres planes de bibliotecas que llevamos hasta el día de hoy.


En este proceso de planificación, concretamente en el segundo plan Bibliotecas de Barcelona 10 años +, se desarrolló el catálogo de servicios de las bibliotecas. Aparte del fondo de 2.341.485 documentos y el equipo de 448 profesionales que dispone la red de Bibliotecas de Barcelona hoy en día, también dispone de un amplio catálogo de servicios esenciales: el acceso a la información, préstamo, aprendizaje, actividades culturales y de ocio, internet y ofimática, y otros servicios a medida. También hay otro tema muy importante que condiciona los servicios: la singularidad temática de cada biblioteca. Por ejemplo, hay bibliotecas centradas en el cómic, la moda y la literatura latinoamericana, entre muchos otros temas. ¿Cuál es el proceso de definición del catálogo de servicios, por un lado, y de la estrategia de singularidad, especialización y proximidad al territorio, por el otro? ¿Cómo se configuran y se desarrollan?

Cuando preguntas a una persona que no trabaja en bibliotecas ni las frecuentan qué es una biblioteca, te suele decir que es un sitio donde ir a llevarse libros en préstamo o a leerlos, y a estudiar. Esto puede ser el núcleo de los servicios, de lo que todo se parte, pero hoy en día hay muchas capas de los servicios que ofrecemos en las bibliotecas. Creo que el éxito de las bibliotecas públicas en Barcelona ha sido el no ir abandonando ninguna capa. Evidentemente, conservamos esta primera capa de servicios básicos: préstamo, lectura en sala, clubs de lectura, espacios para estudiar, etc. Pero luego, vas situándote en diferentes territorios y vas conociendo sus singularidades.

En las bibliotecas, forma parte de nuestro ADN trabajar en primera instancia con la comunidad que tenemos más cerca y aquí entra, por ejemplo, el tema de las especializaciones de los fondos bibliográficos. Por ejemplo, cuando pienso en las primeras especializaciones que se crearon, pienso en el distrito de Nou Barris, que tenía la Escuela de Circo al lado. Sabiendo esto, cuando se abrió la Biblioteca de Nou Barris, se creó un pequeño fondo dentro de la biblioteca especializado en libros de circo.

Otro ejemplo es la Biblioteca Xavier Benguerel, en la Vila Olímpica, que se abre en el año 1995 (antes del Consorcio de Bibliotecas). Fue la primera biblioteca que tuvo el servicio de préstamo de películas de vídeo, que en esos momentos eran en VHS; entonces, parte de su fondo y de su programación se especializa en cine. Lo mismo sucede con el mismo nombre de la biblioteca: en este caso, la Biblioteca Gabriel García Márquez va a especializar una parte de sus libros y de sus propuestas en literatura y cultura latinoamericana.

Una vez diseñados, consolidados y garantizados todos los servicios en todas las bibliotecas, el principal objetivo de estas especializaciones no es ni más ni menos que hacer que la gente se mueva de una biblioteca a otra, que empiece a conocer la red de bibliotecas. De hecho, el objetivo inicial del Plan de Bibliotecas de 1998 era que, al final de todo el despliegue del mapa de equipamientos, cada barcelonés tuviera una biblioteca a máximo 15 o 20 minutos de casa, andando. La manera de conseguir que un ciudadano interesado, por ejemplo, en poesía se moviera del distrito de Sant Martí hacia el de Horta-Guinardó, era ofrecerle la especialización en poesía de la Biblioteca Guinardó-Mercè Rodoreda.

Entonces, la idea es que con estas especializaciones movemos al ciudadano a conocer diferentes bibliotecas y, al mismo tiempo, diferentes realidades. Y eso funciona, porque los que llevamos muchos años trabajando en las bibliotecas de Barcelona vemos a mucha gente que asiste a eventos diferentes en diferentes bibliotecas de la ciudad.


En esa misma línea, las últimas cifras de 2023 nos dicen que las bibliotecas abrieron 1.498 horas a la semana y recibieron un total de 5.620.026 visitas presenciales. Respecto al modelo de biblioteca presencial versus su actividad virtual, ¿Cómo evoluciona esta convivencia? ¿Cuál es la realidad actual y cuál es la tendencia? ¿Cómo se va configurando el catálogo de servicios que ofrecen las bibliotecas?

Visto desde una biblioteca tan visitada como la Biblioteca Gabriel García Márquez, el «hermano virtual» está allí, sí, pero al otro lado de la pantalla. Se consolidó mucho tiempo antes de la pandemia, pero el Covid-19 hizo disparar el uso y, por razones obvias, acabó de despegar el catálogo de productos virtuales: no solo de libros, sino también de películas, así como el canal de YouTube de Bibliotecas de Barcelona, que estaba casi echando humo durante la pandemia. Igualmente, empezamos a hacer clubs de lectura virtuales, que no los hacíamos hasta ese momento, y tuvieron tanto éxito que se han quedado en nuestra programación.

Entonces, toda la parte digital ha ido creciendo, pero ha ido creciendo más por necesidad que por otra cosa. Sabemos que crece la parte digital e intangible por las cifras, pero también sabemos que la presencialidad en las bibliotecas no decrece, evidenciada por estos millones de visitas al año. Cada día pasan casi 22.000 personas por las 40 bibliotecas de Barcelona.

No tengo las cifras exactas a mano de la actividad digital, pero la convivencia es muy natural. Un buen ejemplo es el sistema de préstamos interbibliotecario de documentos, que ayuda a los usuarios a recibir libros físicos en su biblioteca más cercana. Si no tienen un libro en su biblioteca, suelen pedirlo de otra biblioteca de la red. En tercera instancia, se acude al libro digital. Entonces, el préstamo y el E-Biblio, que es la plataforma digital que tenemos todas las bibliotecas para e-libros y otros recursos digitales, crecen en paralelo y se retroalimentan. Sobre lo digital, me gusta decir que es un buen ejemplo de un servicio más que tenemos en la biblioteca, pero hoy en día la biblioteca es mucho más que venir a pedir un libro en préstamo: ahora la biblioteca es socialización, es relación, es venir a hacer cosas, además de venir a buscar un libro.


Actualmente, las estadísticas dicen que el 46 % de la población de Barcelona tiene el carnet de la Red de Bibliotecas Municipales. ¿Cuáles son las características de estos usuarios por género, nacionalidad y grupo de edad? ¿Cómo están evolucionando las tendencias? Curiosamente, las estadísticas informan de que hay una población joven muy importante y que hay cada vez mayor presencia de lectores no originarios de la ciudad. Desde el conocimiento general de la red y más específico de la Biblioteca Gabriel García Márquez, ¿cómo es el perfil de usuario de la biblioteca?

Diría perfil de usuarios, no de usuario. Suelo decir esto porque no es un único usuario, sino muchos. Sin embargo, creo que hoy en día no existe ningún equipamiento más transversal que una biblioteca pública, que ofrece algo para todos los diferentes perfiles de personas que puedan entrar. En Barcelona también tenemos el modelo de los centros cívicos, y trabajamos con ellos muy a menudo, pero vas a un centro cívico si te has apuntado a hacer algo: una clase de Taichí, un taller de cerámica, un grupo de conversación, etc. En cambio, en la biblioteca, está el perfil de gente que viene para no hacer nada en concreto.

Como ejemplo anecdótico, desde el primer día que abrimos la Biblioteca Gabriel García Márquez, hay dos señores que vienen a cualquier hora del día y se sientan cada uno en unos sillones que hay en el vestíbulo. Entre ellos no hablan, pero ven a la gente que entra y sale de la biblioteca. Nunca han pasado de la planta baja. Ellos vienen solo a estar en la biblioteca y pasan el día aquí. Entonces, la biblioteca tiene un cierto perfil de no-consumidor porque hace la misma función de una plaza pública —de socializar, pasar el tiempo mirando y saludando a la gente, etc.—, pero es aún más agradable, a veces, porque está cubierto y climatizado. De hecho, en verano e invierno servimos como Refugio Climático [NOTA 4]. A partir de allí, podemos sumar todos los perfiles que queramos.

Tenemos usuarios de préstamos, sí, pero el usuario de biblioteca con carnet ya no viene a hacer solo una cosa, sino que en un momento dado hará cualquier otra. Una persona mayor viene a por libros, pero también se apuntará a un taller de alfabetización digital o pedirá ayuda para entender cómo funciona el móvil. Otras personas se apuntarán a un club de lectura, o a clases de catalán o inglés, vendrán a hacer un taller de cocina saludable en la cocina que tenemos abajo, o en algún momento participarán con más vecinos en la conferencia y el debate que se celebra sobre la historia del barrio... Es decir, no hay un único perfil de usuario de la biblioteca, ni un único uso por usuario.

Aun diciendo esto, también hay un perfil importante que es la gente joven que quiere venir a estudiar en silencio. Es curioso como al final la imagen más clásica de la biblioteca es revindicada por el perfil más joven. Hoy en día una biblioteca pública no puede ser tan silenciosa como antaño, con todo este catálogo de actividades y de gente pululando arriba y abajo que tenemos... La Biblioteca Gabriel García Márquez no es una biblioteca monástica porque también es muy diferente en su configuración del espacio respecto a los demás: no tiene ninguna puerta. Pero los estudiantes siguen pidiendo silencio absoluto. A veces nos hemos reunido y les pregunto, «Si os molesta el ruido, ¿por qué os gusta venir a estudiar a esta biblioteca?». Y su respuesta es porque no quieren estar encerrados debajo de un neón y entre el bosque de estanterías de una biblioteca universitaria, sino donde pueden levantar la vista, ver al exterior y ver a la gente. Nuestra biblioteca permite este cruce de ambientes.


Para dar un poco más de contexto sobre los antecedentes de la biblioteca, antes has hablado del Plan Director de las Bibliotecas 2030, que establece la misión de «Impulsar las bibliotecas de Barcelona como principal servicio cultural de proximidad, de promoción de la lectura y el conocimiento, garantizando el derecho de acceso a la información y al uso de las tecnologías, apoyando la formación continua a lo largo de la vida, y posibilitando la cohesión social y el desarrollo de las personas con igualdad de oportunidades a través de la participación y de las prácticas culturales y creativas». ¿Cuáles son las 4 grandes líneas del Plan Director? ¿Hacia dónde va y qué aspectos prioriza, a grandes rasgos?

Como he explicado antes, el proyecto de Bibliotecas de Barcelona tenía tres grandes fases: el despliegue de los equipamientos en el mapa, actualizar y garantizar los servicios y la fase actual, que se centra en la participación. El plan tiene cuatro líneas que se basan en los derechos culturales que se definieron por el Ayuntamiento en el anterior mandato:

• Línea 1: Derecho de acceso a la información y a la generación de conocimiento.

• Línea 2: Derecho a la lectura, a la escritura y a la expresión oral.

• Línea 3: Derecho a la educación, a la formación continua y a la alfabetización cultural, y derecho a la participación artística.

• Línea 4: Derecho de equidad en el acceso a la cultura y al conocimiento y en la participación cultural.


El usuario está en el centro de este plan. No se trata de un usuario pasivo que viene solo a llevarse libros o a escuchar una conferencia, sino de un usuario activo que propone y entra en la programación de la biblioteca. Y esto no es solo papel. Desde lejos, puedes pensar que la programación de la biblioteca se diseña solo por el equipo. Sin embargo, en la Biblioteca Gabriel García Márquez, por ejemplo, del 70 a 75 % de la programación de la biblioteca viene propuesta desde el usuario, sobre todo por parte de unos usuarios con mucha experiencia en temas relacionadas con nuestra especialización. Por ejemplo, tenemos como usuario el escritor colombiano Luís Luna, que vive en Barcelona y es muy activo. Nos está haciendo talleres de escritura para jóvenes, moviéndoles la cabeza y hasta incluso publicando un libro que han editado ellos mismos, por iniciativa propia, con el resultado de los talleres.

Entonces, estamos hablando de usuarios que tienen mucho que ofrecer. ¿Por qué tenemos que buscar a alguien fuera a encargarle un taller de escritura para jóvenes, cuando viene alguien de alto nivel y nos lo ofrece ya montado y con un éxito asegurado? La prueba es que las dos ediciones que se han hecho de este taller han tenido lista de espera. Esto es solo un ejemplo de los muchos usuarios y ciudadanos que tenemos participando directamente en la programación de la biblioteca.

Hace 12 o 15 años esto no era así. Antes, tú ibas y encargabas una actividad a medida, pero ahora va en dirección contraria: viene la propuesta, la trabajas con el equipo y luego partes de esta idea que viene desde abajo para crear o cocrear la actividad. Y es fantástico. El trabajo de bibliotecaria es desaprender y aprender a toda hora.


La Biblioteca Gabriel García Márquez ocupa un edificio de seis plantas, con una estructura íntegra de madera vista y espacios interiores atractivos y de gran confort. Tiene una superficie construida de 4.508 m² y una superficie útil de 3.429 m². Se inauguró hace dos años, el 28 de mayo de 2022, aunque todos sabemos que siempre hay una larga historia detrás de un proyecto de esta magnitud. ¿Cuándo empieza el proyecto? ¿Cuáles son sus antecedentes?

La Biblioteca Gabriel García Márquez empezó sin ser nombrado «García Márquez», sin todavía tener ni nombre, como traslado de una biblioteca pequeña a una biblioteca de distrito. Previamente funcionaba la Biblioteca Xavier Benguerel como biblioteca de distrito y en este barrio donde actualmente está la García Márquez había una biblioteca muy pequeña, la Biblioteca de Sant Martí de Provençals. Esta ocupó unos 280 m² en la cuarta planta de un edificio que también aloja el centro cívico. Para ponerlo en contexto, esta bien podía ser del tamaño de un piso grande en otro distrito de la ciudad, el de L’Eixample.

Hasta hace poco, era la biblioteca más pequeña de Barcelona y ya estaba fuera de los estándares establecidos en el Plan de Bibliotecas de 1998, que especificaron los metros cuadrados que toda biblioteca debe tener. Empezaron a cambiar todas las bibliotecas pequeñas a grandes y ha habido muchos traslados. En este contexto, en el 2015 el distrito de Sant Martí y el Consorcio de Bibliotecas sacan la licitación del concurso del traslado de la biblioteca, y es cuando gana el concurso SUMA Arquitectura, que son los autores de esta biblioteca. Eran jovencísimos y ya habían quedado finalistas en un concurso para una biblioteca en Helsinki. Entonces, el proyecto comienza en 2015, cuando se gana el concurso; a partir de allí se pone todo en marcha.


¿En ese proceso se desarrolló también el proceso de planificación e interrelación con el entorno y la comunidad local? ¿Cuándo se desarrolló el diseño del catálogo de servicios y el programa funcional de la biblioteca? ¿En qué fase se incorporó el equipo de arquitectos de SUMA, Elena Orte y Guillermo Sevillano?

Es importante notar que cuando haces una biblioteca, no partes de cero. Con los 15 años que llevábamos entonces desde la creación del consorcio de Bibliotecas de Barcelona y los 5 años que llevábamos desde el segundo plan de bibliotecas, ya se disponía de un modelo básico de servicio del que partir. No se parte de un concepto ex novo cada vez que se crea una biblioteca, ni hay que explicar al Ayuntamiento qué es una biblioteca, porque ya tienen la idea interiorizada. A estas alturas del despliegue de la red municipal de bibliotecas, tampoco tienes que acostumbrar a los vecinos a usarlas, porque ya las utilizan desde hace muchos años.

Con estos años de experiencia por parte tanto de la administración pública como de los ciudadanos, queda claro que hay ciertos servicios y características que forman la base de una biblioteca pública. Es por esto que no se trata de un proceso tan participativo desde el principio, de sentarse con los vecinos y preguntarles qué quieren en la biblioteca, sino de proporcionar unos servicios base y después incorporar sus necesidades. Evidentemente se ha contado con ellos, y más en el distrito de Sant Martí, concretamente en los tres barrios a los que sirve la biblioteca (Sant Martí, La Verneda y La Pau), que tienen unos 55.000 habitantes y más de 70 entidades diferentes.

Nunca vas a poner de acuerdo 70 entidades diferentes, pero sí hubo un proceso de información sobre cada paso del proyecto. Se hicieron encuentros vecinales con Elena Orte y Guillermo Sevillano, los arquitectos de SUMA, en el solar de la biblioteca para informarles sobre cómo iba a ser la biblioteca, cómo iban a hacer las obras, cómo se estaba progresando todo... Hubo todo un acompañamiento del vecindario en lo que iba a ser la biblioteca. Y como hemos visto antes, los vecinos del entorno han participado mucho más en la definición de la programación una vez abierta la biblioteca que no en su diseño.

Por lo tanto, el programa funcional de la biblioteca se ha basado en este paquete básico de servicios, en la escucha y en las aportaciones de los profesionales de la propia red de bibliotecas y del equipo de arquitectos. Y está también el acompañamiento desde el principio del cuerpo técnico del distrito. En realidad, este proceso de planificación está pensado desde arriba precisamente porque viene de la experiencia de nuestros técnicos en los Servicios Centrales de Biblioteques de Barcelona y de la Gerència del Servei de Biblioteques de la Diputación de Barcelona, que tienen mucha experiencia en la planificación de estos equipamientos y que han pasado por las diferentes bibliotecas del norte de Europa, que son las más avanzadas.

Siempre se trata de la transferencia de la experiencia o expertise a nivel global, con la finalidad de alimentar el diseño de los programas funcionales de las bibliotecas. Por ejemplo, en una de las ocasiones en que este cuerpo técnico hizo un viaje a una biblioteca del norte de Europa y vio que la biblioteca tenía una radio, pues se pensó en incorporar una radio en la nueva Biblioteca Gabriel García Márquez. Desde hace muchos años el consorcio de Bibliotecas de Barcelona ha estado en las grandes asociaciones internacionales de bibliotecarios, tanto generales como específicas, y siempre ha mirado mucho a los avances de las bibliotecas de Europa, especialmente las del norte.


Desde tu experiencia personal, ¿qué aprendizaje hay en este proceso de trabajo entre profesionales, el diálogo entre el equipo arquitectónico y los profesionales de las bibliotecas?

Las direcciones de las bibliotecas nos incorporamos más tarde en los proyectos. Yo no estaba en 2015, cuando se abren los concursos, cuando se ve que ha ganado SUMA y cuando se empieza a trabajar en el proyecto. Como el equipo tenemos que explicar la biblioteca a mucha gente, hemos hablado mucho con Elena y Guillermo, los arquitectos, y en su opinión nos incorporamos demasiado tarde. Ellos hubieran preferido que estuviéramos más presentes e involucrados en el proceso de planificación de la biblioteca. Yo ya sabía que tenía que venir a esta biblioteca porque dirigía la anterior biblioteca de distrito de Sant Martí, la Biblioteca Xavier Benguerel, y al final me incorporé un año y medio antes de abrir la García Márquez. Y también es lo que he dicho antes: el proceso va muy acompañado. Trabaja mucha gente de la Diputación, del Ayuntamiento, del distrito y del estudio de arquitectura a la vez.

Cuando el equipo completo de la Biblioteca Gabriel García Márquez se incorporó dos meses antes de abrir la biblioteca, nos dimos cuenta de cómo habían cuidado los arquitectos el tema de tener en cuenta la opinión de los bibliotecarios. Por ejemplo, en cuanto a las zonas de trabajo interno, no había semana que un par de tardes Elena y Guillermo no hablaran con todo el equipo. La verdad es que ha sido muy satisfactorio y hemos aprendido mucho trabajando con ellos.


Seguro que te lo han preguntado muchísimas veces, pero es casi obligatorio preguntártelo: ¿cuándo y por qué se la da a la biblioteca el nombre de Gabriel García Márquez?

La verdad es que ha sido casi una feliz coincidencia... Claro, cada uno tiene sus gustos literarios y a mí, de los autores del boom (¡y no lo digo solo ahora!), el que más me gustaba era García Márquez. Era el que más me conectaba con la cosa más rural, del pueblo, que yo he tenido siempre muy presente. Para mí ha sido una gran satisfacción. En realidad, hay una historia institucional atrás. Cuando Gabo muere en el 2014, el Ayuntamiento de Barcelona decide darle la medalla de la ciudad. Él vivió en Barcelona desde 1967 hasta 1974, cuando su agente literaria Carmen Balcells se lo trajo. Ella le puso un piso y un sueldo y él se puso a escribir, dejando el trabajo de negociación con los editores a su agente. No solo trajo a Gabo, sino también a otros grandes escritores latinoamericanos como Carlos Fuentes y Mario Vargas Llosa. Veía que eran autores que estaban haciendo una cosa diferente que estaba slam poetry en América Latina y Balcells, con muy buen ojo, pensó que podía aquí. Pues funcionó y fue el famoso boom de los escritores latinoamericanos.

Entonces, cuando Gabo muere, se le da la medalla de la ciudad, que vienen a recoger sus hijos Gonzalo y Rodrigo y su viuda Mercedes, y se anuncian que la próxima biblioteca que se abra en la red de Bibliotecas de Barcelona llevará el nombre de García Márquez. Y como la biblioteca de Sant Martí de Provençals fue esa «próxima», así nos tocó. Así pues, el nombre no lo decidimos concretamente para esta ubicación.

Aprovecho para decir esto porque muchos vecinos reclamaban que se pusiera el nombre de Francisco Ibáñez, uno de los humoristas gráficos españoles más prolíficos y reconocidos, que era del barrio. Vivía a una esquina de la biblioteca actual. Entonces, a manera de homenaje a él y a su influencia se dedicó en la primera planta de la biblioteca un rincón con toda su obra a disposición de sus usuarios. Lo mejor de todo es que Ibáñez llegó a tiempo de ver la inauguración, ya que esta fue en el año 2022 y él murió en julio de 2023.

Aunque mucha gente no entendió al principio por qué se tenía que llamar a la biblioteca «García Márquez», ahora están orgullosos de ella. De hecho, la decisión de nombrar a la biblioteca «García Márquez» sin duda ha tenido influencia en la especialización de la biblioteca: la cultura y la literatura latinoamericana. Ya había 39 bibliotecas en la red especializadas en cosas muy diferentes, que normalmente tienen alguna relación con el territorio. Como hemos dicho antes, la Biblioteca de Nou Barris tiene relación con el circo. La Biblioteca de Sant Antoni-Joan Oliver está especializado en coleccionismo porque tiene al lado el mercado de los domingos en el Mercado Sant Antoni. En el caso de la Biblioteca Gabriel García Márquez, ya teníamos el nombre puesto y además ya teníamos otras bibliotecas especializadas en novela negra, en poesía, pero no teníamos ninguna en literatura latinoamericana con lo importante que es, con lo importante que es la población latinoamericana en Barcelona y con lo importantes que han sido los autores latinoamericanos en la ciudad también, siendo Gabo el principal. Así se decidió, pues, poner la especialización en literatura latinoamericana.


Más allá de su fondo bibliográfico, la Biblioteca Gabriel García Márquez también aspira a convertirse en un centro de irradiación de la cultura latinoamericana a través de actividades y promoción cultural organizadas al amparo de la estrecha relación que Bibliotecas de Barcelona mantiene con Casa América Cataluña. ¿Cómo se construye y se desarrolla esta alianza? ¿Y cómo se trabaja esta singularidad de la cultura latinoamericana? ¿Cuáles son las principales actividades que hacéis que consideréis singulares?

Bibliotecas de Barcelona siempre ha colaborado puntualmente con Casa América Cataluña, pero en el momento en el que se decide abrir una biblioteca con el nombre de García Márquez y con un fondo especializado en literatura latinoamericana, se firma un convenio formal con Casa América. Celebramos nuestro primer evento con ellos solo 15 días después de la inauguración de la biblioteca: el Festival KM América, un festival de literatura latinoamericana que pretende dar a conocer las nuevas voces de la literatura y la narrativa latinoamericana [NOTA 5].

Es un evento muy grande. Son cinco días, viene mucha gente y el formato del festival es muy bonito porque no es unidireccional. No se trata de llevar a escritores solo para presentar y hablar sobre sus libros recién publicados, sino de fomentar la conversación a través de mesas redondas entre escritores. Esto hace que el festival sea muy relacional y que participe mucha gente.

En este proyecto hemos caminado de la mano con Casa América desde el minuto cero; la biblioteca lleva un poco más de dos años abierta y ya llevamos tres ediciones del Festival KM América con Casa América. Y no hacemos solo este festival con ellos, sino también programamos otras actividades puntuales conjuntamente, tanto en la sede de Casa América como aquí en la biblioteca. Aparte de esto, tenemos muchas otras actividades, desde las presentaciones de libros hasta los clubs de lectura y literatura latinoamericana que lleva Eduardo Ruiz Sosa, el comisario del Festival KM América.

Otra actividad nuestra que es muy singular es El Vaivé, un ciclo de conciertos que hacemos en la biblioteca en verano. Esta actividad nace el primer año de obertura de la biblioteca, cuando pensábamos que no tendríamos mucha actividad en la biblioteca durante los meses de julio y agosto, cuando la gente suele estar de vacaciones.

Como ya habíamos empezado a contactar con mucha gente latinoamericana que venía a la biblioteca a ofrecer sus actividades, detectamos que había una serie de músicos latinoamericanos que venían a Barcelona a tocar en verano o que pasaban por Barcelona en camino a otras ciudades europeas. Por ejemplo, hemos disfrutado de la música de Elizabeth Morris, una cantante chilena que venía de paso a París y se quedó a visitar gente en Barcelona y fue un lleno absoluto, así como de uno de los principales maraqueros del mundo, Manuel Alejandro Rangel.

Entonces, se nos ocurrió hacer un ciclo y llamarlo Vaivé: va y ve. Se trata de la gente que va y viene, y de las músicas que han ido con influencias de aquí para allá y de allá para aquí. Al principio pensamos en montar dos o tres conciertos pequeños en la biblioteca, todos de pequeño formato, pero había mucha demanda y hemos ampliado el programa. De hecho, no ha habido un concierto Vaivé que haya bajado de las 80 o 100 personas en pleno julio y agosto.

Además, tenemos un servicio muy interesante e importante, que es la Radio Maconda [NOTA 6]. Esta se trata de un espacio participativo y una herramienta de comunicación de las Bibliotecas de Barcelona, con toda una serie de programas realizados por personal de las bibliotecas. También tiene el objetivo de acoger, acompañar y desarrollar proyectos para la comunidad.

Al principio, para un bibliotecario clásico o los que llevábamos tanto tiempo haciendo lo mismo, tener una radio en la biblioteca nos pareció muy complicado. Pensábamos que tenerla sería una amenaza: ¿cómo atiendes a toda la gente que viene a la biblioteca y encima haces la radio? Ahora, un año y medio después de su puesta en marcha, podemos decir que la radio es un regalo. Todos los bibliotecarios hemos estudiado biblioteconomía, por supuesto, pero tanto los bibliotecarios como el personal auxiliar tenemos formación en muchas otras cosas: historia, filosofía, pedagogía, ciencias, música y más. Esto es una riqueza que se traslada muy bien a la radio. Por ejemplo, hay un programa que se llama El Chinchorro, que pretende dar recomendaciones de literatura latinoamericana, y otro que se llama Los Invisibles, que se trata de aquellos libros que ya no se encuentran en ningún sitio y que solo los puedes encontrar en las bibliotecas.

Para los que no nos atrevemos o no tenemos tiempo para elaborar un programa propio, también participamos en un podcast que se llama Tinta a Volum, que es un repositorio de cuentos para adultos y también para niños y jóvenes. Es una radio para pasárselo bien, además de ser un gran productor de contenidos. Ahora mismo hay 22 programas diferentes y unos 150 podcasts grabados de estos programas, todo esto en tan solo un año y medio.

Otro proyecto imprescindible es nuestro Espacio Sensorial. Las bibliotecas vamos sumando capas: vamos avanzando, probando e incorporando cosas. Nuestro espacio sensorial está ubicado en una parte de la sala infantil y está dotado de una serie de elementos que —vía el oído, el tacto, la vista y otras formas de estimulación sensorial— pueden ayudar a los niños que tienen desórdenes sensoriales o alguna dificultad para seguir un relato o un cuento. Entre estos elementos y la narradora de los cuentos, pretendemos ofrecer una experiencia más completa e inmersiva. Por ejemplo, si el cuento se trata de ir en tren, los niños están sentados encima de un cojín vibrador que simula el movimiento del tren, para que se puedan meter más en la historia.

Aparte de las actividades dirigidas, también tenemos un espacio dentro de este Espacio Sensorial que las familias pueden usar libremente durante unas tardes a la semana. De momento, estamos explorando las posibilidades del Espacio Sensorial. Por ejemplo, nos interesa hacer experiencias para los más pequeñitos, el bebé que viene con su familia para leer los libros que son blanditos o sin palabras, que no deja de ser una experiencia sensorial.

Ahora también estamos desarrollando un catálogo de diferentes acciones para el espacio, experimentando todo junto a las familias usuarias, porque es un concepto nuevo para todos. De hecho, hay un precedente en la Biblioteca Bon Pastor, donde se habilitó un cuarto como espacio sensorial para satisfacer las necesidades de las familias usuarias; allí el espacio ha ido creciendo poco a poco. Sin embargo, aquí es al revés: dedicamos un espacio grande desde el principio y nuestro equipo infantil ha ido aprendiendo mucho, sin conocimientos especializados, pero con mucho entusiasmo y la ayuda de las buenas compañeras de la Biblioteca Bon Pastor.


Por todo lo que has ido explicando, entiendo que la Biblioteca Gabriel García Márquez pretende ser una institución referente para la comunidad local, generando un espacio compartido muy rico y muy potente para el barrio y para toda la comunidad latinoamericana de la ciudad, donde se puede sentir identificada e implicada. ¿Cuál ha sido la respuesta ciudadana a la biblioteca y a su catálogo de servicios?

Después de dos años, se ha generado una familiaridad importante. Yo ya conozco y saludo por sus nombres a muchos de los asistentes que vienen a las actividades porque ellos participan en muchas cosas diferentes. Es como una cadena. Cuando todavía estábamos a puerta cerrada y colocando los libros, ya había gente que sabía que había llegado un busto de García Márquez desde Colombia, aunque todavía no había salido en ningún sitio la noticia y nosotros no se los habíamos dicho a nadie. Había gente que pedía entrar a la biblioteca a fotografiarse con el busto antes de que abriese la biblioteca.

Es decir, la comunidad latina de Barcelona ya estaba al corriente de que se iba a abrir; no les suena la biblioteca solo porque haya sido premiada con posterioridad, como pasa con otros grupos. Tengo un compañero en el equipo que dice que la Biblioteca Gabriel García Márquez es como el «CCCB Latino», por decirlo de una manera [NOTA 7]. Es una biblioteca, pero es más que una biblioteca: hay gente que solo viene a la biblioteca para participar en estas actividades, porque la consideran como un centro cultural latinoamericano. En definitiva, es un lugar de referencia para la comunidad latinoamericana de Barcelona.


La biblioteca también se ha ido construyendo una relación importante con la comunidad local de Sant Martí. ¿Cómo trabajáis con los centros educativos y con los agentes sociales y culturales del entorno más inmediato?

La potencia de los centros educativos de Sant Martí es muy importante. Como ya he dicho, hay más de 55.000 habitantes a nuestro alrededor, así que se puede imaginar el número de escuelas e instituto que hay en la zona. Directamente al lado tenemos dos centros educativos —el Instituto Joan de Austria y el Instituto Infanta Isabel de Aragón— que son históricos y pioneros. Trabajamos mucho con ellos.

En términos generales, todas las bibliotecas tienen un paquete básico de acciones educativas que hacemos que incluye las visitas escolares y a demanda. En la Biblioteca García Márquez enriquecemos esto con una visita exclusivamente centrada en el trabajo de Francisco Ibáñez y en cómo evoluciona el cómic, sobre todo para los estudiantes de entre 9 y 12 años. Otra parte importante de nuestro trabajo educativo tiene que ver con la radio, donde desarrollamos un proyecto que se llama Radio Aula Maconda. Con el Centro de Recursos Pedagógicos de Sant Martí hemos elaborado este plan donde la radio es la excusa para trabajar la comprensión lectora. Aquí enseñamos a los estudiantes cómo funciona todo técnicamente y además se trabaja en temas muy importantes hoy en día como la construcción de las noticias y el control del fake news.

Primero les formamos contra este tema del fake news, enseñándoles cómo se pueden identificar y desarrollando el pensamiento crítico. Luego, enseñamos cómo se estructura y se elabora un buen guion, y después tienen que ir a locutarlo en la radio, con formación sobre cómo leer una noticia en voz alta. Esta es una manera lúdica de trabajar el pensamiento crítico, la redacción y la creación de historias y la parte oral de locución de un texto.

Ya vamos por la segunda edición del programa y ha sido un gran éxito en los 10 centros educativos con los que hemos trabajado. En cuanto a la acción social, siempre me gusta destacar la parte invisible de las visitas. En estos últimos dos años hemos hecho cerca de 520 visitas a medida. A la biblioteca han venido instituciones, bibliotecarios y arquitectos de todo el mundo, pero un tercio de las visitas que ha recibido la Biblioteca García Márquez son de carácter social, tratando de colectivos con necesidades especiales como de aprendizaje del uso básico de los servicios de la biblioteca.

Por ejemplo, han venido personas de la Escuela Oficial de Idiomas de La Pau que están aprendiendo castellano o catalán y les hacemos visitas guiadas clásicas a la biblioteca como un sitio donde pueden buscar recursos e información. También recibimos alumnos del Consorci per a la Normalització Lingüística, que enseña clases de catalán.

Además, recibimos grupos de personas muy diversas: la gente que se dedica a trabajar con la salud mental y la soledad no deseada; parados de larga duración que buscan empleo a edades donde ya es difícil acceder al mundo laboral; personas discapacitadas; gente mayor; personas que vienen de las prisiones y mucho más. Claro, cuando viene un cónsul, un alcalde, los del Gremio de Leñadores de Canadá, por ejemplo, esta es la parte que más se ve.

Pero la parte que menos se ve, todas las visitas «invisibles» que no salen en las fotos, lo social pesa mucho en Sant Martí y en nuestra biblioteca. Además, trabajamos con muchas entidades comunitarias locales para planificar actividades alrededor de su conocimiento y de su manera de habitar el territorio, con un enfoque importante en la memoria histórica del antiguo pueblo de Sant Martí de Provençals y de los diez barrios que forman el actual distrito de Sant Martí.

Tenemos un fondo importante de libros, revistas y otros recursos multimedia y audiovisuales sobre el distrito de Sant Martí y hemos hecho muchas series de conferencias y ciclos en la sala de actos donde los vecinos vienen a explicar la historia del barrio a los nuevos vecinos. Por ejemplo, la gente explica que el barrio no tuvo su primera finca hasta 1954 —antes todo era huertas— y que se ha ido haciendo fincas cuando la gente vino a trabajar en los años 1960 y 1970.

También hacen intercambios y conversatorios sobre la inmigración más recientes y la influencia de la población latina que vive en Sant Martí, en la Verneda y la Pau. Muchas de estas charlas se hacen con una entidad social del barrio que se llama la Societat d’Estudis de la Verneda de Sant Martí, que tiene una capacidad de convocatoria muy importante. Sus charlas siempre están llenas, desde el momento que empezamos a trabajar con ellas, y la gente participa mucho, preguntando o discrepando en los detalles.

Al final, en la Biblioteca García Márquez trabajamos en muchas dimensiones: desde lo internacional, con la gente que viene a fotografiarse con el busto del escritor, hasta lo local, con los vecinos explicando la historia local.


Este trabajo comunitario seguramente requiere un conjunto de habilidades importantes por parte del equipo humano de la biblioteca, algunas de las cuales ya hemos ido mencionando a lo largo de la entrevista: la capacidad de escuchar, de relacionarse con los usuarios, etc. ¿Puedes elaborar un poco más sobre alguna otra habilidad necesaria para el buen funcionamiento de la biblioteca?

Sobre todo, la flexibilidad y la adaptabilidad son características muy necesarias. El trabajo en una biblioteca pública no es mecánico: cada día te pasa mucha gente por delante con necesidades muy diversas y no tienes tiempo para convertir tu trabajo en una rutina, aunque sí hay elementos o tareas comunes que hay que hacer cada día. Pero aquí en la Biblioteca García Márquez hemos tenido que poner la máquina a cero y aprender nosotros también, y esto es un regalo porque nos mantiene despiertos. Siempre tenemos que estar atentos a qué pasará.

Tomamos el ejemplo del espacio físico de la biblioteca. Esta es la primera biblioteca de la red que se abre sin puertas, con todos los espacios y todas las plantas conectadas, con todo el ruido que esto conlleva. También es la primera biblioteca que cuenta con mucho mobiliario informal: la famosa hamaca (¡que no es solo para fotografías!), los columpios, los sofás, los sillones, los pufs, las mecedoras... Hay tanto mobiliario informal como formal y esto implica un uso muy diferente de la biblioteca, así como una circulación y unos flujos de gente muy diferentes.

Hay gente desorientada porque entra en la biblioteca pensando que van a encontrar un sitio de mesas y sillas, y encuentra el sitio aquel que hemos querido materializar en «tercer espacio», aquel espacio que no es ni tu casa ni tu lugar de trabajo o estudio. Lo tienen que aprender los usuarios, pero también tenemos que aprender a explicarlo los trabajadores.

Y para el equipo, toda esta parte de explicar el uso del espacio al mismo tiempo que lo habitábamos por primera vez ha sido algo muy fresco, como un reset. Nos quitamos de la cabeza que los pies no se ponen en el sillón, porque los van a poner. Tienes que aprender a decir: «Quítate los zapatos», en vez de: «No pongas tus pies». Un gesto tan pequeño pero multiplicado por mucha gente que tiene que aprender a usar el espacio, nosotros incluidos. Y no solo hablo del espacio, sino también de la participación de los usuarios en la programación de la biblioteca.

Ahora tenemos que leer los cientos de propuestas que puedan entrar en un mes por correo electrónico y decirles sí o no. Además, muchas personas vienen por el premio IFLA, pero hay muchas otras que tenemos que atender según sus necesidades variadas. Para los bibliotecarios de la Biblioteca García Márquez, es importante recordar que no mandamos en la biblioteca; tenemos que trabajar con mucha más gente que la que compone el equipo de trabajo estricto. Y claro, esto nos tiene que abrir la cabeza a la fuerza. Si no nos abre la cabeza, mejor cambiamos de chip... o de oficio.


La Biblioteca Gabriel García Márquez ha sido galardonado la Mejor Biblioteca Pública del Mundo del año 2023 por la IFLA. Primero, hace falta destacar que estas cosas no llegan porque sí, sino porque hay mucha voluntad y esfuerzo detrás. En este caso, estamos hablando del trabajo y la voluntad permanente de la red de Bibliotecas de Barcelona y de la Diputación de Barcelona de estar presente a nivel internacional, así como la voluntad del Ayuntamiento de Barcelona de participar en el Consorcio y apostar por la designación de Ciudad Creativa de Literatura de la UNESCO. Toda esta estrategia de la internacionalización ayuda a crear las bases para ganar un premio tan significativo.

Tienes toda la razón: ya he dicho anteriormente que un éxito no se improvisa, viene de muy atrás y de tener toda una red de bibliotecas desplegada hasta llegar a la biblioteca número 40. Desde el principio me planteé el premio como un premio a la trayectoria de las Bibliotecas de Barcelona, tras más de 20 años desplegando este proyecto de ciudad. Pensaba: «Toca a la Biblioteca García Márquez como lo podría haber tocado en su momento a otra biblioteca». De hecho, la Biblioteca Jaume Fuster también tiene un Premio FAD. Pero la realidad es que este premio se basa en una candidatura y unos requisitos, sobre todo, el de haberse inaugurado el año anterior al premio. Por lo tanto, más que en el proyecto, que no puede avanzar muchísimo en tan solo un año, el premio se centra en el edificio.


La excepcionalidad de la Biblioteca Gabriel García Márquez respecto a este premio es doble: primero, porque es la primera vez que se concede este prestigioso premio a una biblioteca del sur de Europa, y segundo, porque es la más pequeña de entre las pasadas galardonadas, apenas 4.000 m² frente a otras gigantes como la Biblioteca Pública de Missoula (EE. UU.) con 10.000 m², la Deichman (Noruega), con 13.500 m², y la Oodi, la biblioteca pública central de Helsinki (Finlandia), con 18.000 m². ¿Por qué crees que la Biblioteca García Márquez ha sido la primera ciudad del sur de Europa y la primera biblioteca pequeña que gana este premio?

A la final, de todas las bibliotecas que se presentaban, llegaban cuatro: la Biblioteca Gabriel García Márquez, en Barcelona, España, con 4.000 m²; la Biblioteca Municipal de Parramatta, Australia, que no llega a los 5.000 m²; la Biblioteca Pública Valvasor, en Krško, Eslovenia, que tiene unos 3.500 o 3.700 m²; y la Biblioteca del Este de Shanghái, China, que tiene 110.000 m². Aquí es importante destacar que, de las cuatro finalistas, tres tenían menos de 10.000 m². A mí me gusta pensar que esto ha servido para impulsar un cambio en la ILFA, que nunca antes había premiado a una biblioteca de menos de 10.000 m².

Como ya has dicho, la Biblioteca Pública de Missoula, en el Estado de Montana, Estados Unidos, la anterior, contaba con 10.000 m², y la Biblioteca Deichman, en el barrio Bjørvika, la principal biblioteca pública de Oslo, Noruega, tenía 13.500 m².

Entonces, nunca había llegado a premiar a una biblioteca pequeña ni una biblioteca del sur. Este premio lo tienen generalmente las bibliotecas del norte de Europa, alguna norteamericana y las asiáticas. Se nota que ha habido un claro cambio de escala y geografía en la IFLA este año, y quizás un reconocimiento a un trabajo diferente.

Aquí vuelvo a repetir que el contexto de la Biblioteca García Márquez es especial y creo que esto ha influido en el premio, o al menos ha creado las condiciones posibles para que se lo pudiera ganar en el 2023. Barcelona lleva más de 20 años implementando su Plan de Bibliotecas, que tiene una dotación económica potentísima detrás y un consenso político que no ha tenido ningún otro tema. Esto ha hecho posible desplegar toda la red de bibliotecas, llegando al número 40. Encima, hemos puesto la guinda en la biblioteca número 40 con un edificio de esta singularidad, precioso y ubicado en un territorio de clase obrera donde, en principio, faltaba una buena biblioteca.


Según el comunicado de las Bibliotecas de Barcelona, la Biblioteca Gabriel García Márquez se ha hecho con el galardón por la buena valoración en los siguientes puntos: «La interacción con el entorno y la cultura local, la calidad arquitectónica del edificio, la flexibilidad de los espacios y servicios, la sostenibilidad, el compromiso con el aprendizaje y conexión social, la digitalización y soluciones técnicas de los servicios, el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible que marcan las Naciones Unidas y la visión global del servicio que establece la IFLA».

Claro, ya hemos hablado bastante de la interacción que tenemos con el entorno y la cultura local, la flexibilidad de nuestros espacios y servicios, y el compromiso que tenemos con el aprendizaje y la conexión social. Creo que la calidad arquitectónica del edificio y la sostenibilidad son temas muy importantes que van de la mano. El hecho de levantar una biblioteca cuya estructura está hecha totalmente de madera es muy original para una ciudad mediterránea y muy sostenible a la vez.

Se ha hecho un edificio singular que es tan sostenible que, en el caso que se quiere desmontar, casi todo se puede compostar. El vidrio, no, pero las láminas sí que tienen un alto nivel de reciclaje y de reaprovechamiento, y los 28 tráileres de madera que usaron para la estructura de la biblioteca sí se puede compostar. A esto sumamos las placas solares que hay en la terraza y el hecho de recoger el agua de lluvia para regar el jardín.

Además, se cuidó la sostenibilidad no solo en cuanto a los materiales, sino también en cuanto al proceso de construir la biblioteca. Tardaron solo cuatro meses en levantar la estructura y el hecho de usar madera en vez de hormigón era mucho más beneficioso en cuanto a la reducción de la emisión de gases y de ruidos, y esto se agradeció por parte de los vecinos porque Sant Martí tiene un tejido muy denso.

Y respecto a la digitalización y las soluciones técnicas de los servicios, se ha valorado nuestra instalación de un sistema de autopréstamo, así como algunos mecanismos de medición que hemos implementado en la biblioteca. Con esto no me refiero a mecanismos de control: no son cámaras de vigilancia, pero tenemos una serie de mecanismos que nos permiten saber cuánta gente hay en cada sala en cada momento. Ahora también podemos medir el tiempo de estancia en la biblioteca, que antes no se medía. Hay toda una serie de soluciones digitales y técnicas que nos permiten tener más información a mano sobre el uso de la biblioteca para que podamos avanzar y mejorar los servicios que ofrecemos, a la vez que damos más autonomía a los usuarios con el servicio de autopréstamo.


Además del premio de la IFLA, la Biblioteca García Márquez también ha ganado otros premios desde su inauguración: el premio Ciudad de Barcelona de Arquitectura, el premio FAD de Arquitectura y en abril de 2024 aún llegó a ganar el premio Mies van der Rohe de Arquitectura Europea. Obviamente, con este conjunto de premios, la biblioteca ha salido mucho en la prensa. Además de ser un icono cultural para la comunidad latinoamericana de Barcelona, se ha convertido en un icono mediático. Antes apuntabas también el hecho de ser un destino de profesionales, de instituciones y de turistas. ¿Nos puedes explicar qué ha sido el impacto de este conjunto de premios y su correspondiente atención mediática?

Partimos de la base de que no es una biblioteca a la que viene poca gente. Desde su inauguración en mayo de 2022 hasta enero de 2023 cuando nos otorgaron el Premio Ciudad de Barcelona de Arquitectura, la biblioteca tenía una media de unos 1.600 o 1.700 visitantes al día en invierno, que es cuando vienen todos los estudiantes y se hacen muchas actividades, y unos 1.200 al día en verano. Por lo tanto, ya de entrada partimos de una cifra diaria por encima de 1.000 personas.

Entonces, la biblioteca empezó a salir en la prensa de manera moderada con el primer premio, el Ciudad de Barcelona de Arquitectura, y luego nos otorgaron otro premio arquitectónico más técnico, que no atrajo demasiada atención mediática. Sin embargo, cuando salió la noticia del premio de la IFLA, estábamos a 21 de agosto, cuando ya hay pocas noticias en la televisión y en los periódicos por ser época de vacaciones, y los medios se volcaron con esta noticia.

También es cierto que esta biblioteca es muy «instagrameable», es decir, es atractiva para los jóvenes que vienen con el móvil en la mano para hacerse selfies y subir sus fotos a Instagram. El relato de su singularidad se basa y se simboliza en la hamaca, paradójicamente, en el mueble más barato de la biblioteca y el más fotografiado. Además, hay otros guiños al Caribe, como pueden ser unas sillas y mecedoras muy características de aquella región, de la marca Tucurinca, que a su vez es el nombre de un pueblo de Colombia al lado de Aracataca, donde nació Gabo. Y todo esto está presente en una biblioteca de aspecto nórdico, por la madera, lo cual hace un edificio muy singular y atractivo.

Por tanto, toda esta actividad de la gente joven y su interés por el aspecto de la biblioteca contribuyó al salto mediático que culminó con el premio de la IFLA. Durante las dos semanas después de ganar el premio de la IFLA, vinieron entre 3.000 y 4.000 personas al día. Es un cambio muy grande y un ritmo que se ha mantenido por bastante tiempo; solo hace un mes hemos bajado de 2.000 personas los sábados. Ahora la biblioteca es un destino turístico de interior, de todo el país.

El efecto de la etiqueta «Mejor Biblioteca Pública del Mundo» ha atraído a muchísima gente y esto ha ido en detrimento, en parte, de lo que se espera que sea una biblioteca pública al uso. La parte positiva ha sido la de aprovechar la experiencia y la profesionalidad de todo el equipo para mantener los pies en el suelo y que esto no se nos fuera de los manos a nivel mediático y para que a los estudiantes y los usuarios de Sant Martí que llevaban años reivindicando la biblioteca no se la quitaran de las manos. Claro, se han rodado programas de televisión aquí, se han hecho directos con la radio o con Tele Caracol en Argentina, Colombia o México... Venían usuarios a decirnos: «¡Tengo la sensación de que me graban como a Copito de Nieve!».

Por todo esto, el reto ha sido mantener toda esta atención mediática al margen de una biblioteca con mucho uso diario. De hecho, hemos rechazado muchos comerciales —a marcas de coches de lujo, por ejemplo— que quisieron cerrar la biblioteca para hacer sus anuncios. ¿Cómo vamos a cerrar la biblioteca, con lo que ha costado abrir? Nos prometían que estos anuncios nos darían más visibilidad, pero más visibilidad es la última cosa que queríamos en esos momentos.

Al mismo tiempo, entendemos que la biblioteca es un producto que ha costado mucho dinero y en cuanto a conceptualización... Todo el mundo quiere lucirla, pero no podemos olvidarnos de que es un servicio público y muy reivindicado por los usuarios. Es decir, teníamos que buscar el equilibrio entre la funcionalidad y el peaje mediático, que en cierta forma es necesario para seguir mejorando y construyendo más bibliotecas en la red de Bibliotecas de Barcelona.

Luego del «Mejor Biblioteca del Mundo», que hizo eclosionar todo, vino el Premio FAD, un premio muy importante a nivel arquitectónico. Entonces, empezamos a tener más arquitectos transitando por la biblioteca. Empezaron a venir excursiones de arquitectos y a hacer aquí sus jornadas de arquitectura. Después del FAD, nos otorgaron otro premio, el Mejor Obra Arquitectónica de Madrid 2023, porque SUMA es un estudio de arquitectura de Madrid y los arquitectos, Elena y Guillermo, están colegiados y viven en Madrid. El último premio, que recibimos este año, es el Premio Mies van der Rohe de Arquitectura Europea. Me gusta bromear diciendo que todavía queda el Premio Pritzker, pero como este se otorga a toda una carrera y los arquitectos todavía son muy jóvenes, aún queda tiempo... Así pues, en cuanto a los premios, consideramos que son más que suficientes. Ahora, pasada esta fiebre, ya nos podemos concentrar más en el funcionamiento y en la mejora continua de nuestros servicios como biblioteca pública.


Apenas un año después de ganar el Premio IFLA, la «Mejor Biblioteca Pública del Mundo» se encuentra con la necesidad de remodelar una parte de la obra construida. Desde la dirección de la biblioteca, ¿cómo se tiene que interpretar dentro del proyecto tanto la remodelación del edificio como la etiqueta de «Mejor Biblioteca Pública del Mundo»? ¿También es una oportunidad para mejorar los servicios en el futuro? He leído que hay previsto poder habilitar un espacio de la fachada para hacer un posible escenario para más actos y presentaciones.

En dos años hemos empezado y cambiado muchas cosas en la biblioteca. Al no tener puertas, al tener un mobiliario muy móvil y al tener tantos usos diferentes con los que no contábamos al principio, es muy fácil cambiar las cosas y decidir ampliar. De hecho, empezamos por ampliar la plantilla, porque abrimos con una plantilla de 15 personas para seis plantas y ocho mostradores.

No sabíamos que íbamos a desbordar por parte de la comunidad latinoamericana, ni sabíamos que iban a venir todos los premios, ni que la gente iba a responder con un uso masivo de la biblioteca. Entonces, con el premio de la IFLA vino el momento de redimensionar la plantilla, ampliándola a 21 personas, sobre todo porque los usuarios nos reclamaban abrir los domingos por la mañana. Sabían que hay tres bibliotecas en la ciudad que abren los domingos por la mañana —la Biblioteca Jaume Fuster, la Biblioteca Sagrada Familia y la Biblioteca Can Fabra— y ahora abrimos lo mismo que ellas y tenemos la misma plantilla.

En cuanto al edificio, no intuíamos que la programación de la biblioteca iba a tener tanto impacto en la comunidad latina, con lo cual la sala de actos nos ha quedado pequeña. Afortunadamente, las puertas de la sala de actos son una cristalera que se pueden abrir para poder incorporar la parte de abajo de la biblioteca, pero esto implica que se oye por toda la biblioteca. Hemos tenido que crear un espacio de silencio rápidamente en otra parte del sótano que antes ocupaba una entidad, quien ha sido realojada en otro edificio del barrio.

En este sentido, el modelo ha ido más rápido que las necesidades de la gente: los usuarios quieren un espacio clásico para estudiar y nosotros se lo habíamos quitado para abrir la sala de actos a más personas, porque allí también hubo una necesidad. Por ejemplo, cuando hicimos la presentación de la novela póstuma de Gabo, había unas 160 o 170 personas abajo con las puertas abiertas, porque en la sala de actos solo caben 110 personas sentadas. Ahora, como dices, aprovecharemos las obras de mejora del edificio para ampliar el espacio para actividades de la biblioteca.

Es el primer edificio público con estructura de madera en triángulo con tanta abertura y una escalera en medio. La madera es un material vivo y no se comporta igual aquí que en los países nórdicos: en verano coge humedad y con el calor crece, y esto ha roto algunos cristales de la fachada, desde el mirador de arriba hasta los de la planta baja. Pienso que si los principales premios de arquitectura los hemos ganado, aunque los jurados hayan visto los cristales rotos, será por algo, porque se trata, precisamente, de un trabajo innovador y, por tanto, arriesgado. Igual era un poquito más que arriesgado, aquello que dices de que se podría haber previsto cómo se iba a comportar el material... Y se entiende que hay mucha gente que se enfada por el coste tanto del edificio como de su remodelación.

La realidad es que tenemos unos desperfectos en el edificio, pues hay que repararlos. Lo bueno es que nos da la posibilidad de expandir las actividades de la sala de actos hacia el exterior. Tenemos una pantalla que mira hacia la calle que hemos usado muy poco, pero si hay un evento de mucha afluencia en la sala de actos, ahora intentaremos colocarla debajo de la nueva pérgola que se creará y conectarla con la sala de actos y así asegurarnos de que las actividades masivas estén funcionando al mismo tiempo en la sala de actos y arriba, en la calle.


Para terminar, desde la dirección y el equipo de la biblioteca, ¿hacia dónde se trabaja o se imagina el futuro del proyecto de la Biblioteca Gabriel García Márquez?

¿Dónde nos llevará esta biblioteca? Pues, donde quiera la gente. ¿Qué futuro imaginamos? El que quiera la gente. Estamos muy dispuestos y hemos aprendido en estos dos años a ir no solo con los tempos mediáticos, sino también con los tempos del mismo proyecto. De hecho, tenemos ganas de seguir desarrollando el proyecto, que ha ido en paralelo con los premios. Nos encanta el proyecto de Radio Aula, el de Radio Maconda en general, el Festival KM América y el ciclo El Vaivé...

Nos encanta ver los talleres de jóvenes llenos, y que sean ellos los que vengan a proponernos cosas. Unos jóvenes vinieron este año a pedirnos si podrían reunirse para hacer slam poetry, concursos de recitado de un género casi entre poesía y rap. Pues en el slam poetry la media de edad de los participantes estará en los 24 o 25 años. Es tremendo ver la sala llena de jóvenes haciendo combates de poesía de creación propia. Ahora la slam poetry ya forma parte de la programación de la biblioteca. Aunque la biblioteca no crea esta programación, se llega a hacer aquí porque el equipo tiene ganas de escuchar y de aprender.

A lo mejor, en una institución más encorsetada, no habría ese diálogo o capacidad de respuesta, pero no somos gente que pasamos por aquí y si no trabajamos en biblioteca, trabajamos en otra cosa. La primera regla del juego es que te guste la gente y la segunda, estar vacunado contra la rutina. Tenemos muy pocos compañeros que digan que no les gusta la gente, que prefieren trabajar solo con los libros antes que con las personas. El mostrador es una incógnita diaria y la biblioteca no tiene un cartel en la puerta que avisa que está reservado el derecho de admisión o que acote a la población por grupos. Cabe todo el mundo y, por esto mismo, no sabes lo que vas a encontrarte delante cada día. Y todo esto es precisamente lo que hace que la biblioteca funcione, que sea un servicio público por y para todos. Solo esperamos y seguimos trabajando para que siga siendo así en el futuro.



NOTAS (Última comprobación de los enlaces: 25 de mayo de 2025)

1. Plan de bibliotecas de Barcelona 1998-2010, Barcelona, Ajuntament de Barcelona: Institut de Cultura de Barcelona, 1998. Disponible en catalán en:
https://ajuntament.barcelona.cat/biblioteques/sites/default/files/pla%2098-10%20catala.pdf

2. Bibliotecas de Barcelona 10 años +: nuevos retos, nuevas oportunidades, Barcelona, Ajuntament de Barcelona: Consorci de Biblioteques de Barcelona, 2011. Disponible en catalán: Biblioteques de Barcelona 10 anys +: nous reptes, noves oportunitats. Del Pla de Biblioteques de Barcelona 1998-2010 a les propostes per al 2020, Barcelona, Ajuntament de Barcelona: Consorci de Biblioteques de Barcelona, 2011.
https://ajuntament.barcelona.cat/biblioteques/sites/default/files/bb_propostes2020.pdf

3. Plan director de bibliotecas de Barcelona 2030. Derecho a la lectura, al acceso a la información y al conocimiento. Fomento de las prácticas creativas y de la participación comunitaria. Barcelona, Ayuntamiento de Barcelona: Consorcio de Bibliotecas de Barcelona, 2022.
Página de información:
https://www.barcelona.cat/infobarcelona/es/plan-director-de-bibliotecas-de-barcelona-2030-5_1229189.html
PDF de la edición en catalán, con acceso a las ediciones en castellano e inglés:
https://ajuntament.barcelona.cat/biblioteques/sites/default/files/pla_director_biblioteques_barcelona.pdf

4. Más información sobre la red de Refugios Climáticos de Barcelona y un mapa de las instituciones participantes disponibles en:
https://www.barcelona.cat/barcelona-pel-clima/es/acciones-concretas/red-de-refugios-climaticos

5. Más información sobre el Festival KM América en:
https://www.americat.barcelona/es/km-america-2023

6. https://xrclab.cat/es/radio/radio-maconda/

7. El Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) «es un centro cultural multidisciplinar dedicado a explorar los grandes temas de la sociedad contemporánea por medio de distintos lenguajes y formatos, con un extenso programa que incluye grandes exposiciones temáticas, ciclos de conferencias y encuentros literarios, proyecciones audiovisuales y festivales».
Tomado de: https://www.cccb.org/es/el-cccb