septiembre 16, 2023

Estrategias y actividades para mejorar el aprendizaje gramatical en el trastorno específico del lenguaje o TEL. Programa de intervención de un equipo de la Universidad de La Laguna



Gustavo M. Ramírez Santana, Víctor M. Acosta Rodríguez, Ana M. Moreno Santana, Nayarit del Valle Hernández, y Ángeles Axpe Caballero
«El uso combinado de narraciones orales y actividades morfosintácticas para mejorar habilidades gramaticales de alumnado con trastorno específico del lenguaje (TEL)»

Revista de Psicodidáctica, vol. 23, n.º 1 (2018)

Revista de Psicodidáctica | Universidad del País Vasco | Leioa (Bizkaia) | ESPAÑA


Extracto del apartado Introducción y Discusión de la publicación en PDF, páginas 49 y 53-54. Véanse las referencias en la publicación original. Artículo publicado en abierto.




Introducción

Los niños con trastorno específico del lenguaje (TEL) se caracterizan por mostrar un trastorno primario en el aprendizaje del lenguaje en ausencia de déficits neurológicos, cognitivos o sensoriales. Aunque suele ser habitual la presencia de dificultades en diferentes áreas del lenguaje, son sus déficits gramaticales los que están particularmente afectados, presentando serias limitaciones en la producción y comprensión de oraciones complejas, así como un gran volumen de estructuras agramaticales. Aunque la mayor parte de la información sobre este tema procede de trabajos realizados con poblaciones de niños y niñas de lengua inglesa, en los últimos años se ha incrementado considerablemente el interés investigador por conocer qué ocurre en otras lenguas, entre ellas, con hablantes del español. Así, diversos estudios señalan la existencia de problemas en la producción de artículos, en el uso de pronombres clíticos y en el manejo de las inflexiones verbales.

Las consideraciones anteriores hacen necesario dirigir el foco de la intervención para alumnado con TEL hacia sus déficits en el sistema gramatical. Sin embargo, los resultados obtenidos hasta la fecha por los distintos tratamientos implementados no han estado exentos de problemas, debido en gran parte a la enorme divergencia en los diseños utilizados. Así, por ejemplo, se han incluido objetivos de intervención gramaticales en programas de estimulación general del lenguaje frente a otros de naturaleza mucho más específica; en otras ocasiones se ha prestado excesiva atención a la producción en detrimento de la comprensión, o se ha puesto un mayor énfasis en las edades más tempranas en comparación con niños mayores y adolescentes, y finalmente, ha habido una gran diversidad en las formas de organización de los programas (profesionales versus padres, uno a uno versus grupo), tanto como en las aproximaciones de intervención; esto es, implícitas, explícitas, y la combinación de aproximaciones.

En relación con este último aspecto, trabajos recientes como los de Ebbels y Mendoza hacen una revisión de las diferentes aproximaciones con las que se aborda la intervención gramatical. En ellos se señala que las aproximaciones implícitas usan métodos que intentan facilitar la adquisición de formas gramaticales frecuentemente omitidas por el alumnado de entre 4 y 12 años. Los procedimientos más comunes son la imitación, el modelado, la estimulación focalizada y el recast o reformulación. Las aproximaciones explícitas se dirigen directamente a la enseñanza de reglas gramaticales, a menudo mediante el uso de señales visuales. Entre ellas habría que reseñar las claves en color y el empleo combinado de formas, colores y flechas para indicar las diferentes partes de la morfología y de la sintaxis. Finalmente, las aproximaciones combinadas hacen uso de las narraciones orales y de actividades morfosintácticas con el propósito de conseguir objetivos gramaticales.

En esta última aproximación —la que combina narraciones orales y actividades morfosintácticas— habría que situar el presente estudio. El objetivo principal es la mejora de la producción gramatical y, consecuentemente, la reducción de la agramaticalidad en alumnado diagnosticado con TEL. En particular, y con respecto a las diferentes fases del programa de intervención, los objetivos específicos del presente estudio son los siguientes: en primer lugar, reducir la agramaticalidad general en niños con TEL; en segundo lugar, limitar la producción de oraciones agramaticales; y finalmente, disminuir la producción de errores gramaticales, tanto morfológicos como sintácticos.



Discusión

A pesar de que se sostiene que los problemas de naturaleza gramatical son los más habituales entre el alumnado con TEL, no hay muchos estudios empíricos cuya meta sea verificar qué tipo de estrategias y actividades son las más beneficiosas para su mejora, especialmente en la etapa de la educación primaria. Precisamente este es el principal objetivo del presente estudio, es decir, comprobar si un programa de intervención que combina historias ficticias junto con actividades morfosintácticas, tal y como sugieren autores como Swanson et al. y Proctor-Williams, tiene efectos positivos sobre la disminución de dicha agramaticalidad en niños hispanohablantes con TEL.

Los resultados obtenidos son óptimos. El primero de los objetivos, que persigue reducir la agramaticalidad general de los escolares con TEL, cumple con un criterio bien establecido, ya señalado en investigaciones previas sobre intervención morfosintáctica, según el cual se recomienda aplicar un número diversificado de estrategias durante un dilatado periodo de tiempo.

En efecto, la resolución de los problemas gramaticales no suele producirse rápidamente; por el contrario, se necesita de una práctica repetida, del ofrecimiento de numerosas oportunidades, y de la modificación progresiva de las estrategias ofrecidas con el fin de reducir los esfuerzos en el aprendizaje, por parte del alumnado con TEL.

El programa ha sido sensible con estas sugerencias, garantizando que contara con el apoyo de numerosas estrategias, encuadradas dentro de las denominadas orientaciones implícitas, lo cual resulta determinante para que el alumnado con TEL pueda identificar reglas gramaticales, así como para construir aquellas formas que tienden a omitir o a producir de manera incorrecta. En consecuencia, tal y como recuerdan Eisenberg y Gillam y Gillam, la combinación de estrategias como el recast o la reformulación, la estructuración vertical, la estimulación focalizada, el modelado y la imitación, proporcionan al alumnado con TEL modelos más elaborados que estimulan su producción gramatical compleja.

Con respecto al segundo objetivo, que persigue limitar la frecuencia de producciones oracionales agramaticales, se considera que el programa desarrollado se muestra eficaz, ya que como se desprende de los resultados, la producción de oraciones agramaticales disminuye de manera estadísticamente significativa. En nuestra opinión, en este punto resulta trascendental la introducción de actividades morfosintácticas, ya que a través de ellas se consigue que el objetivo gramatical sobresalga mucho más. Ello se obtiene, por ejemplo, por medio del tachado de las palabras incorrectas en oraciones, del ordenamiento de oraciones presentadas de manera desorganizada o por el uso de soportes gráficos para asociar una frase con su dibujo. De esta manera se logra que el alumnado con TEL esté expuesto de forma regular a estructuras gramaticales obligatorias.

También se puede aminorar considerablemente la producción de errores gramaticales, tanto morfológicos como sintácticos, es este el tercero de los objetivos del presente estudio. En este caso, la estimulación de la producción más elaborada de narraciones orales facilita la confección de un discurso mejor construido lingüísticamente, realizando una producción sin dificultades morfológicas y sintácticas. Todo ello con la estimable ayuda de estrategias que ofrecen un input adecuado con el propósito de influir en el uso por parte del alumnado con TEL de determinados elementos y estructuras gramaticales.

Es cierto que esta actividad supone un mayor esfuerzo inicial para las logopedas, pero también lo es que en su implementación resulta compensado por la abundancia de oportunidades de aprendizaje significativas que favorecen la eficacia de la intervención.

Finalmente, creemos conveniente añadir que con este estudio se está en condiciones de ofrecer, a toda la comunidad educativa, un modelo de trabajo integral u holístico que se define por estar organizado en tres niveles interactivos de práctica.

En primer lugar, se intenta reducir la ambigüedad, con objetivos bien explícitos, estimulando la producción correcta y ofreciendo feedback correctivo. En este nivel se presenta material con actividades morfosintácticas más estructuradas y dirigidas.

En segundo lugar, se precisa introducir y combinar el trabajo dentro de contextos lingüísticos más complejos y contextualizados, recurriendo para ello a la producción de narraciones orales y al uso de estrategias de enseñanza implícitas (p. ej., recast o reformulación, estimulación focalizada).

En tercer lugar, tal y como señala Proctor-Williams, es necesario profundizar en la que posiblemente constituye la principal limitación de este estudio, esto es, en la deseable participación de otros agentes educativos en la intervención, como los padres y los educadores del alumnado con TEL. Su colaboración constituye un elemento crucial para asegurar un mejor aprendizaje, así como la generalización de los objetivos morfosintácticos en contextos más naturales.




No hay comentarios:

Publicar un comentario