Publicado en El Universal, por Edwin Raimond.
«El objetivo de esta disciplina es contribuir al flujo continuo de las ideas entre las diferentes áreas del conocimiento para hacer que la sociedad se torne más justa, más abierta al diálogo, más reflexiva.
»De acuerdo con el Diccionario de la Real Academia Española, la retórica es el arte de bien decir, de dar al lenguaje escrito o hablado la eficacia suficiente para deleitar, persuadir o conmover.
»La Retórica, de Aristóteles, fue escrita hace más de 2 mil 300 años. Esta obra, que expone las formas de argumentar, quedó prácticamente en el olvido a partir del siglo XVII. La causa de este abandono fue que el sistema de Descartes se impuso sobre otros sistemas filosóficos, centrándose más en la racionalidad que en la argumentación.
»Con la publicación en 1958 de las obras Teoría de la argumentación, de Chaïm Perelman, y Los usos del argumento, de Stephen Toulmin, la retórica ya no fue considerada un área de la teoría de la literatura ni una rama de la estilística, sino una disciplina vinculada estrechamente a la filosofía, la hermenéutica, la lingüística y la semiótica.
»Gerardo Ramírez Vidal, investigador del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM y responsable del proyecto El dominio retórico y sus modelos, nos explica distintos aspectos relacionados con esta disciplina.
»“Perelman reinterpretó y renovó la retórica aristotélica, con lo cual ésta ya no se redujo al análisis de los fenómenos estilísticos, sino que fue vista como el estudio de las formas argumentativas. Así, empezó a darse un intercambio bastante fructífero entre varias disciplinas y se redescubrieron nuevas áreas de la retórica.”
»El renacimiento de la retórica en la segunda mitad del siglo XX no resultó definitivo; todavía en la década de los años 60 muchos estudiosos pensaban que esta disciplina era el arte de hablar florido, pero de manera oscura. Años después, en 1980, la retórica fue tratada al fin como una disciplina seria en alto grado. En la actualidad, tan sólo en Estados Unidos hay miles de maestros que imparten clases de retórica.
»“En su libro El imperio retórico, publicado en 1977, Perelman señaló que en Estados Unidos había más de 5 mil maestros de retórica; ahora, el número de éstos es muchísimo mayor en ese país”, afirma el investigador universitario.
»Camino largo e irregular
»Desde sus inicios, el camino de la retórica ha sido largo e irregular. Esta disciplina es adversa a la inmutabilidad y favorable al cambio; no queda satisfecha con la elaboración de discursos eficaces sólo en el ámbito político; por eso, en el diálogo Fedro, Platón propuso que abarcara cualquier tipo de discurso en prosa o verso, público o privado.
»Actualmente existen diversas retóricas, entre las que sobresalen la religiosa, la periodística, la científica y la académica; asimismo, gracias a los avances tecnológicos e interdisciplinarios, la retórica aspira a abarcar otros ámbitos más allá del discurso verbal, como la música, la pintura y la Internet.
»“La retórica no se quedó anclada en la antigüedad clásica, sino que amplió su radio de acción a todo tipo de discurso, e incluso, por la difusión y el uso de los sistemas digitales, a regiones más allá del discurso verbal. En Europa ya se estudia la retórica de la Internet; también se analiza la retórica de la pintura, de la música, etcétera.”
»Para los antiguos griegos, la actuación tenía una función capital no sólo en el teatro, sino también en cualquier exposición oral, para que el discurso fuera eficaz y el auditorio se convenciera de que el orador estaba hablando con la verdad. Es decir, además de argumentar correctamente, era crucial actuar de modo elocuente.
»“Demóstenes es considerado el más grande orador de todos los tiempos; él recurría a la actuación. En alguna ocasión, alguien le preguntó: ‘¿Qué es la retórica?’ Y respondió: ‘En primer lugar, actuación; en segundo, actuación; y en tercero, actuación.’ Entonces podemos decir que la retórica también incluye esa práctica”, comenta Ramírez Vidal.
»La claridad es otro de los elementos fundamentales de la retórica, porque, para convencer y persuadir, es esencial ser claros, concisos, francos. Por lo tanto, la retórica es enemiga del disimulo y la mentira; se orienta hacia lo verosímil.
»“La función de la retórica antigua era demostrar la inocencia o la culpabilidad de un acusado y persuadir de ir a la guerra o de firmar la paz con base en datos históricos y argumentos que se acercaran a la verdad.”
»A veces, esta disciplina se asocia a los tiranos. Un ejemplo más o menos reciente es la retórica de Hitler, aunque vale la pena aclarar que los mecanismos de persuasión empleados por este dictador eran esencialmente autoritarios.
»“La retórica de Hitler era muy particular, pues unía el puño a la palabra. Era una retórica vociferante, unidireccional, que iba de una persona a las demás, pero realmente no daba lugar a un diálogo ni a un debate”, indica el investigador.
»En México
»Incluso antes de que México fuera un país independiente, la retórica tuvo un papel capital en la historia de nuestra nación. Por ejemplo, no pocos insurgentes que participaron en el movimiento independentista habían sido maestros de retórica, en particular el cura Miguel Hidalgo y Costilla y José María Morelos y Pavón.
»“Igualmente, numerosos personajes del Congreso de 1857 —que puede considerarse el mejor ejercicio deliberativo de la historia de México— estudiaron la retórica clásica. En cuanto a los revolucionarios de la Convención de Aguascalientes, si bien no fueron estudiosos de la retórica como disciplina, sí eran retóricos apasionados que aprendieron los mecanismos de persuasión mediante el ejemplo y la imitación.”
»Acabada la Revolución Mexicana, los caudillos crearon un tipo de retórica que no cambió mucho en las siguientes ocho décadas. Emplea una serie de tópicos, lugares comunes y formas de expresión que ha tenido una enorme influencia en la cultura del país y que aún predomina.
»“En resumen, durante la época de la Reforma, los parlamentarios, en su mayoría formados en la cultura clásica, obtuvieron de ésta ejemplos para ilustrar sus discursos e ideas y hacerlos persuasivos. Durante el régimen de Porfirio Díaz no hubo debate; la palabra fue expulsada de su recinto por excelencia: el Congreso de la Unión. Posteriormente, con la Revolución Mexicana renació la retórica práctica en los grandes debates del Constituyente de Querétaro y durante la Convención de Aguascalientes, cuando las discusiones fueron más sugestivas y abiertas. Al finalizar la Revolución Mexicana se creó otra retórica: la del partido en el poder.”
»Mayor libertad de expresión
»Como el México postrevolucionario no se distinguió por ser un país cien por ciento democrático ni pacífico, no existían aquí las condiciones que en los países desarrollados hicieron posible el estudio de los mecanismos discursivos y el desarrollo de la retórica.
»En un principio, gracias a las publicaciones estadounidenses y europeas que llegaban al país, la retórica comenzó a estudiarse en las universidades mexicanas. Pero a partir de las elecciones de 2000, cuando hubo un cambio en el poder político, la sociedad misma impulsó un nuevo periodo de transición democrática que favoreció directamente el desarrollo de la retórica en México.
»“La retórica práctica surgió en circunstancias particulares de carácter democrático, de debate abierto y de exposición libre de las ideas, como fue precisamente la retórica en su origen, que nació con la emergencia de los regímenes democráticos en muchas ciudades-Estado de la antigua Grecia, particularmente en Atenas”, dice Ramírez Vidal.
»Desde finales de la década de los 90 del siglo XX, México comenzó a cambiar. Es cierto que todavía falta por mejorar muchas cosas e incluso no pocas han empeorado en algunos sentidos; sin embargo, se puede reconocer que el discurso gubernamental es menos autoritario y, en general, la sociedad mexicana tiene mayor libertad para expresar lo que piensa. En suma, la retórica política en México tiene pocos avances, pero nada desdeñables.
»“Es evidente que, en comparación con lo que había antes, estamos muy adelantados. En el pasado, la retórica predominante no admitía más que la palabra dictada desde Los Pinos.”
»Vida plenamente civilizada
»El régimen autoritario en México ya llegó a su fin en buena medida; no obstante, la televisión, que ocupa un lugar central en la vida de los mexicanos, ha ocasionado un declive en la retórica de los narradores populares y ha reducido bastante el léxico de los jóvenes.
»“En general, los medios electrónicos han tenido efectos negativos en el caso de esta retórica popular o tradicional, que era tan rica hace décadas. Ahora bien, yo no sé si realmente nuestras expresiones discursivas han perdido tanto vigor, como parece; sería un asunto que debería estudiarse”, señala el investigador.
»En conclusión, el objetivo de la retórica es el mismo que persiguen otras disciplinas humanísticas, a saber: contribuir al flujo continuo de las ideas entre las diferentes áreas del conocimiento para hacer que la sociedad se torne más justa, más abierta al diálogo, más reflexiva.
»“La retórica nos brinda conocimientos sumamente útiles, tanto para la propaganda política como para la transmisión de los conocimientos filosóficos, el debate y la discusión académica. Hoy en día, gracias a la Internet, tenemos la oportunidad de profundizar en la retórica y, de este modo, alcanzar una vida plenamente civilizada”, concluye Ramírez Vidal.»